Ingredientes para 4-6 personas:
- 500 g de garbanzos
- 250 g de bacalao en salazón para desalar o ya desalado
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- 4 dientes de ajo
- 1 tomate
- Una hoja de laurel
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de pimentón dulce y media cucharadita de comino molido
- Una bolsa de espinacas frescas
- Sal
- Opcional: huevo cocido
- Deja en remojo los garbanzos doce horas con agua y un poco de sal o bicarbonato. Pasado ese tiempo lava muy bien y elimina todo resto de impurezas y algún garbanzo que veas que está malo.
- En una olla pon los garbanzos y cubre con agua. Pon la mitad de la cebolla, una zanahoria troceada y dos dientes de ajo y hoja de laurel.
- Deja cocer unas dos horas en olla tradicional y 20 m en olla rápida.
- Una vez cocidos los garbanzos, saca la cebolla, los ajos y la hoja de laurel.
- En una sartén fríe la otra media cebolla troceada, dos dientes de ajo y un tomate (antes le quitas las semillas y lo troceas).
- Primero el aceite, luego la cebolla, cuando esté transparente echa los ajos y después el tomate.
- Cuando estén dorados, añades una cucharadita de pimentón dulce y deja cocer dos o tres minutos.
- Pasa por la batidora junto a un poco de caldo y añade a los garbanzos que ya estarán tiernos y deja cocer diez minutos que se mezclen los sabores.
- Incorpora las espinacas crudas y limpias y troceadas y finalmente el bacalao desalado troceado. Un chorreoncito de aceite de oliva virgen extra. Y media cucharadita de comino molido.
- Deja cocer hasta que todo esté bien mezclado. Prueba de sal. Y listos para comer.
- Si no tienes espinacas, también puedes hacerlo con acelgas.
- Si ves que el guiso está muy líquido, fríe una rebanada de pan y mezcla con caldo para que le dé consistencia.
- Opcional: Puedes cocer un huevo y la yema batirla junto al pan frito. Si tienes mucha prisa, unos garbanzos de bote también van bien. No es lo mismo, pero se puede hacer con buenos resultados. Las espinacas frescas, pero por supuesto que si no las encuentras, utilízalas congeladas. Y con bacalao, y sin bacalao sale un potage riquísimo.