Revista Cine
En 2009 se estrenó en nuestros cines el film La duquesa, de titulo original The Duchess, protagonizada por Keira Knightley, Ralph Fiennes, Dominic Cooper y Hayley Atwell. El film nos cuenta la historia de Georgiana Spencer nacida en Althorp en 1757. A los 17 años se convirtió en Duquesa de Devonshire y señora de Chatsworth Housep, obteniendo así la riqueza y el poder del Duque que le valió la atención del público y se convirtió en la reina de la alta sociedad, adulada y caricaturizada por la prensa. Su vida social era notoria y llena de fiestas, lujos y política pues su alianza con el político Charles James Fox hizo que se convirtiera en una importante figura del partido Whig, haciendo campaña para solicitar el voto para el partido en las elecciones de 1784. Su éxito social ocultaba una vida personal que estuvo cargada de sufrimiento a consecuencia de un matrimonio vacío, donde el Duque de Devonshire fue notoriamente indiferente a los encantos de su mujer y prefirió a su mejor amiga, Lady Elizabeth Foster, dando lugar así, a un matrimonio a tres bandas .Georgiana se embarcó entonces en una apasionada aventura con Charles Grey, y cuando se quedó embarazada de él fue exiliada por el Duque, a su regreso continuó viviendo con el Duque y Bess Foster muchos años en una relación triangular.La historia nos traslada al siglo XVIII, una época donde la finalidad más importante de una esposa, sobre todo si su marido tenía algún título, era dar a luz a hijos varones, pues en la nobleza inglesa sólo los hijos, y no las hijas heredan los títulos y las propiedades ligadas a este. Además de mostrarnos las dificultades e injusticias que podía vivir una mujer en el siglo XVIII dentro de su matrimonio, también refleja los deberes que tenían los hombres, respecto a sí mismos y a sus familias, pues aunque nos parezca que el Duque es egoísta, malo, déspota y un largo etc… la realidad es que el Duque no es más que un hombre de su época, donde el único deber exigido a todo hombre, era tener descendencia masculina a quién dejar las propiedades. Así podemos a ver como el Duque y la Duquesa están encerrados en un matrimonio que no les hace felices a ninguno de los dos, donde su deber (que no pueden eludir) es tener hijos varones, donde los dos buscarán la felicidad fuera del matrimonio, pero con una gran diferencia, que el Duque tenga una amante en casa siempre será entendido como una pequeña indiscreción, pero que la Duquesa tenga un amante, no está permitido. La película explica de forma muy real y veraz los acontecimientos, la sociedad, las leyes y el protocolo propios del siglo XVIII, en la nobleza, de tal forma que no es difícil para el espectador entender y acercarse a los personajes. Pero aunque el film refleja a la perfección la realidad de la época, también es necesario decir que el film es un poco frio, en el sentido de que la película no llega a emocionar o a transmitir mucho al espectador.Recomiendo este film a todas aquellas personas que les interesen los films de época y los dramas, pues esta es su película, sobre todo si tiene interés en buscar paralelismos entre Lay Dy y una de sus antepasadas, Georgiana Spencer. Para aquellos que vean el film, avisar que las localizaciones, no son decorados, sino que el film fue rodado Chatsworth, Bath y otras casas de la nobleza inglesa.Valoración: 4/5