Podrían haber sido diferentes las cosas, pero primero una bandeja fácil de Tunceri cubría de gloria a Turquía a falta de 0.5 segundos por jugar, dejando paso a los siguiente.
Posesión para Serbia, jugada ensañada, vista en multitud de finales apretados. Saque de banda, el jugador serbio recibe el balón, lanza y ocurre lo siguiente:
De no haber sido por el tapón de Semih Erden (jugador de los Boston Celtics) el tiro hubiera entrado.
El broche de oro para Semih Erden en este mundial, en el que ha mostrado muchos de sus puntos fuertes. Finalmente, puede que quizás tenga un hueco en la rotación del equipo.