Todos nosotros hemos pasado muchos días, o semanas enteras, sin recibir ningún gesto de cariño del prójimo. Son momentos difíciles, cuando el calor humano desaparece, y la vida se reduce a un arduo esfuerzo por sobrevivir.
En esos momentos en que el fuego ajeno no le da calor a nuestra alma, debemos revisar nuestro propio hogar. Debemos agregarle más leña y tratar de iluminar la sala oscura en la que nuestra vida se transformó.
Cuando escuchemos que nuestro fuego crepita, que la madera cruje, que las brasas brillan o las historias que las llamas cuentan, la esperanza nos será devuelta.Si somos capaces de amar, también seremos capaces de ser amados. No es más que cuestión de tiempo. (Autor: Paulo Coelho)
El año 2014 está a punto de finalizar y la última noche del año, muchos son los rituales y los simbolismos que alrededor del mundo suelen realizarse para recibir el año nuevo, y si bien algunos no creen en la magia y en la energía de este nuevo ciclo, son más los que desde tiempos inmemorables han mantenido y heredado una serie de costumbres para garantizar salud, prosperidad, amor, suerte y muchas cosas buenas durante los 365 días del año que se avecina.
Como quiera que sea y de cualquier manera que lo celebren, recuerden que ese paso de las hojas del calendario, se trata de un ciclo que se cierra y otro que se abre, lleno de esperanzas y posibilidades; es un tiempo que invita a la reflexión interna para aceptar los errores y aprender de ellos, para agradecer al universo una año más de vida, plantearse nuevas metas, estrategias para alcanzar todo lo bueno que se propongan.
Una de ésas costumbres es reunirse con los seres queridos, familias, amigos….y degustar antes de las clásicas doce uvas de la suerte, una cena. El menú que propongo, es sencillamente que a través del buscador del blog, de Mi cocina, miren y remiren (recuerden que hay más de 1.500 entradas) y preparen lo que más se ajusta al gusto personal de sus comensales. No obstante, comparto lo que con más probabilidad habrá en mi mesa….
Marisco surtido, con casi total seguridad….
Algún tipo de ensaladilla, como ÉSTA de aguacates rellenos de ensaladilla rusa...
Con total seguridad, unos voulavanes de pollo, puerro y champiñones con una bechamel muy ligera….la receta la subiré en breve al blog, pero va en ésta linea. Un buen caldo de puchero malagueño, con su ramita de hierbabuena…o de picadillo ¿Les llega el olorcito?
Igual habrá algún miembro de mi familia que me pida que le añada soja y fideos de arroz, ésa pasión por oriente se nota en casa ((ésta es la receta)O alguna carne rellena…bien de cerdo o pollo
Y un postre ligerito….que éste año, ya que en días pasados fue el turrón el gran protagonista en mis pasteles, optaré por algún pudin bien de nueces (aqui encuentra como prepararlo)o frutos secos (pinchando AQUI tienen la receta) Un año más, dejemos que se vaya con él todo lo negativo, lo que nos hizo sufrir, el temor, la ambición, el egoísmo, la desilusión, la ceguera espiritual, la indiferencia por los que sufren,…y abramos nuestra puerta en este nuevo año que comienza, al quieto y silencioso susurro de nuestros más elevados sentimientos, murmullos que nos harán escuchar nuestros pensamientos como música que nos habla de los mejores deseos, de generosidad, de comprensión y cariño para quienes nos rodean.
Ese sería un gran comienzo de año y algo bueno que festejar…mientras desde Mi Cocina, deseo a quienes la visitan todo lo mejor para el 2015. Brindaré por Vds.