El gran señor de las gaviotas, el gavión atlántico Larus marinus, es otra de las especies que podemos encontrar en invierno por nuestro litoral. El lugar de atracción para esta especie, como para otras muchas, es la bahía de Gijón, pero en otros enclaves siempre podemos encontrarnos ejemplares solitarios o pequeños grupitos.
No cabe duda de que los más llamativos son los adultos, en especial las aves de mayor tamaño, que suelen ser machos, como éste que levo unos días registrando por Bañugues.
Si se ve junto una especie de tamaño mediano, como la cabecinegra, se puede percibir la enorme talla de estos ejemplares.
Hoy localicé otro adulto diferente a éste en la ensenada de Aramar, un poco más pequeño y estilizado.
Y hace unos días éste que ya señalé de la playa de Xivares.
Los jóvenes son muy característicos, grandes, con el pico compacto y con un aspecto muy blanco, como éste también de Bañugues.
Si se observan de cerca se pueden apreciar las características de su plumaje, como éste que localicé en Candás a primeros de enero.
Se aprecia bien el contraste entre las plumas coberteras y terciarias, aún de juvenil, y las escapulares, ya mudadas en su totalidad.
Los que menos se ven son los inmaduros, de plumajes intermedios entre juvenil y adulto. Este por ejemplo es un segundo invierno de Xivares, de hace unos días.
Se ve que ya va oscureciendo su plumaje. Y por fin en los terceros inviernos, como éste de Bañugues del domingo pasado, el negro es claramente predominante.