Tales of Halloween, cómicos gags

Tales of Halloween nos presenta en 90 minutos diez historias independientes, dirigidas por diez directores distintos. Por lo que sale una media por segmento de menos de diez minutos que no da para muchos rodeos, eso está bien.
Todas las historias son independientes, pero el conjunto, busca la unión narrativa de todos los hechos ocurridos en una misma noche de Halloween y en un mismo barrio. Basándose en cuentos y leyendas; demonios, extraterrestres, espectros y asesinos con hacha aparecen por una noche para aterrorizar a sus residentes.
Esa unión se realiza incluyendo personajes, en segundo plano, entre las distintas historias. Si bien, acaba siendo puramente anecdótica. Es una buena forma de justificar que todo guarda una mínima relación.
En la mayoría de películas de historias cortas, unas eclipsan a otras. Pero en Tales of Halloween, ninguna de sus historias despunta por encima de las restantes, a pesar de encontrarse dirigidas por diez directores distintos.
El film resulta muy equilibrado, artísticamente hablando. Mantiene una tonalidad similar en todas sus historias. Sobre todo, en aspectos técnicos como la fotografía e iluminación, dotando al film de una presencia uniforme.

Cómicos gags

Algo que no suele darse en este tipo de propuestas. Más aún, cuando sus historias son tan cortas, como es el caso. Lo habitual, es que cada director vaya por su lado, sin prestar demasiada atención a los aspectos técnicos del resto de segmentos. Siendo los más profesionales -y con razón- los que, finalmente, se llevan los halagos, como en ABC’s of Death, por ejemplo.

En ese punto, Tales of Halloween tiene mi aprobado, iguala la calidad visual y argumental. Sin embargo, el resultado individual me parece fallido en todos los casos.
Pero el problema no lo veo en esa igualdad de condiciones, si no en que ni siquiera los más experimentados nos hayan ofrecido unas historias más interesantes y dignas de su propia categoría como cineastas experimentados dentro del género de terror.
Porque si algo sorprende en Tales of Halloween, no son sus segmentos en forma de teatrales y cómicos gags, qué tan ‘enérgicos’ empiezan, como tan abruptos acaban. Lo que sorprende realmente en todo esto, es conocer la ‘identidad’ de algunos de esos directores.

Nombres tan destacables como Lucky McKee (May), Neil Marshall (The Descent) o Darren Lynn Bousman (Saw II) pisan el plató, y al lado de otros tan poco duchos, como Mike Mendez (Big Ass Spider), Paul Solet (Grace) o Dave Parker (The Hills Run Red).
Causa extrañeza al ver que ninguno de los experimentados, haya sido capaz de presentar unas historia, ya no diré, con una calidad interpretativa o puesta en escena brutal. No estamos ante una propuesta presta a esas valoraciones, precisamente.
Pero sí que se le puede reclamar, que sus historias fuesen lo suficientemente entretenidas como para recordar, algo que no sucede en ninguna de las diez historias del conjunto, tan simpático como olvidable.

Rápida gamberrada

Está claro que Tales of Halloween es una ‘gamberrada’ que otorga a sus realizadores el privilegio de realizar algo rápido y sencillo. Hasta aquí, nada que objetar. Siempre y cuando cada segmento, o algunos de ellos pudieran presumir de algo más, que de no ser chorra.

Su mayor problema es el regusto televisivo extremo que mantiene. Además, sus efectos especiales son demasiado amateur en sus dos vertientes, en lo digital y en lo artesano.
Y en general, tiene una falta de garra argumental en todas y cada una de las historias presentadas, haciendo del conjunto algo muy flojo y poco destacable. Una propuesta con una banda sonora tan acorde a la festividad que homenajea y ese toque tan ochentero, es una lástima que se vea eclipsada por algo tan sencillo de remediar, la falta de garra en sus historias.