La tarta Sacher o Sachertorte es una de las tartas más conocidas a nivel mundial. Se trata de una tarta de chocolate rellena de mermelada de albaricoque y con una cobertura de chocolate, vamos una delicia. La receta de la tarta Sacher original es todo un secreto pero ya tenemos muchas adaptaciones y es fácil encontrar por la red la "Eduard Sacher Torte" adaptada, esta no es su receta original pero os garantizo que se asemeja mucho ya que yo he probado la original en Viena y está clavada.
La tarta Sacher es la perfecta elección para los amantes del chocolate. He decir que yo no soy muy de dulce y esta es increíble ya que logra un equilibrio perfecto entre el amargor del chocolate y el dulzor de la mermelada de albaricoque. Si queréis otra receta diferente podéis echar un ojo a mi sección de recetas de postres.
La original Sacher Torte lleva un glaseado de chocolate negro brillante. En este caso he puesto una cobertura de chocolate tradicional que queda igual de bien, pero ese brillo es difícil de conseguir.
Si eres un apasionado de este gran ingrediente puede echar un ojo también a una clásico bizcocho de chocolate o si te gusta el hojaldre, hacer unas palmeritas de chocolate, muy crujientes.
Trabajar el chocolate en casa es muy complejo ya que para manipularle correctamente necesitamos unas condiciones óptimas de humedad y temperatura. Por ello en muchos grandes restaurantes o reposterías tiene una sección específica de repostería para que los cambios de temperatura de una cocina no puedan afectar al resultado final.
Si queremos conseguir el bizcocho perfecto únicamente tenemos que pinchar el bizcocho con un palillo, si sale seco está listo. Con este truco podréis hacer bizcochos tales como el bizcocho de naranja, el bizcocho clásico de yogur o el de chocolate que he mencionado anteriormente.
Origen de la tarta Sacher
Por suerte, he de decir, que he estado en el lugar donde se creó la tarta Sacher en Viena y probarla, un espectáculo. Esta tarta fue inventada en 1832 por Franz Sacher, un joven aprendiz de repostero. Este pastelero abrió una tienda de dulces en Viena donde empezó a vender esta gran tarta. En 1876 se fundó el hotel Sacher, que todavía podemos visitar, donde se empezó a vender hasta el día de hoy este postre.
Si en alguna ocasión tenéis la oportunidad de viajar a Viena, una de las ciudades más bonitas donde he estado, no dejéis de visitar la pastelería Demel (Kohlmarkt 14, Viena, Austria). En ella podréis probar la mejor y original tarta Sacher del mundo. Un imprescindible si, como yo, sois unos amantes de los viajes gastronómicos.
Ingredientes para hacer tarta Sacher
- 100 gramos de harina
- 100 gramos de mantequilla
- 100 gramos de almendras crudas
- 6 huevos
- 100 gramos de azúcar glass
- 70 gramos de cacao en polvo
- 10 gramos de levadura química
- 300 gramos de mermelada de albaricoque
- 100 ml de nata para montar
- 140 gramos de chocolate para postres de fundir
- 20 gramos de mantequilla
- 3 cucharadas soperas de agua
Cómo hacer tarta Sacher
1.- Comenzamos preparando el bizcocho. Lo primero será tostar las almendras a fuego lento en un sartén. Vigilad bien las almendras porque a mi una vez se me quemaron pero bien.
2.- Una vez tostadas las almendras las trituramos hasta que se hagan polvo. Reservamos.
3.- En un bol comenzamos mezclando con unas varillas. Bate la mantequilla y el azúcar. La mantequilla debe estar a temperatura ambiente.
4.- Separamos las claras de las yemas y las montamos con la ayuda de un robot de cocina, vamos agregando el azúcar glass en forma de lluvia. Si no tenéis pues a mano con unas varillas aunque será más pesado ponerlas a punto de nieve.
5.- Agregamos las yemas y las almendras al bol, seguimos mezclando.
6.- Continuamos con el cacao en polvo.
7.- Añadimos al bol las claras montadas y mezclando con movimientos envolventes.
8.- Ahora es momento de agregar la harina tamizada. Con la ayuda de un colador tamizamos la harina. En este paso también añadimos el polvo de hornear.
9.- Untamos un bol con mantequilla y harina y vertemos la masa. Dejamos reposar unos 10 minutos y horneamos a 180º durante 35 minutos. Para comprobar que está listo pinchamos con un palillo y debe de salir seco.
10.- Dejamos enfriar el bizcocho y nos ponemos con la cobertura.
11.- En una cacerola ponemos la nata, el chocolate y la mantequilla. Que se derrita por completo. Agregamos las cucharadas de agua y seguimos mezclando.
12.- Abrimos por la mitad el bizcocho y lo rellenamos de mermelada de albaricoque, ponemos una capa de mermelada fina o gruesa, eso depende del gusto de cada uno. Cerramos y cubrimos con la cobertura de chocolate.