Todo empezó hace más o menos un mes atrás, de la que habiendo visionado anteriormente el trailer y dejarme con la boca abierta, decidí que esta película tenía que verla sí o sí. Por temas de crisis y demás, empecé a buscarla por la red durante semanas sin conseguir nada a cambio, ya que ni siquiera está en su versión original, y además contando que aquí donde vivo solo la han estrenado en un cine, y ese está en Valencia capital.
Pasado el sorteo de la Lotería, la nochebuena, y el día de Navidad, el día 28 de Diciembre, como de una clásica "inocentada" se tratara, me aventuré con lo puesto, y después de trabajar, con el coche a la estación de trenes más cercana, decidido a ir a la capital con el propósito de ver la ansiada película.
Con un tren de cercanías más lleno que de costumbre, con la calefacción a tope, y con una revista de corte cinéfilo me dirigía a Valencia, una vez allí, preguntando aquí y allá a gente, a decir verdad, bastante amable, fui caminando hasta el grandioso multicine situado en pleno centro urbano, y al llegar allí me llevé una sorpresita, resulta que como era Miércoles, y ese es el día del espectador, junto con las fechas navideñas, la cola para sacar las entradas de haber estado en linea recta hubiera rodeado la manzana, algo que me hizo estar alrededor de tres cuartos de hora para sacar mi preciada entrada. Una vez dentro, fui a la sala correspondiente, como me era de esperar había muy poca gente. Claro, ¿Quién iba a aventurarse a ver una película muda y en blanco y negro, si en otras salas hacían la última de la saga Crepúsculo, o las peripecias de Ethan Hunt y su equipo en la cuarta de Misión Imposible, por nombrar algunas? Además que, menos yo, toda la gente era de mediana edad. Aunque una vez allí, sentado en la cómoda butaca y esperando a que empezara la proyección, poco a poco fue entrando gente, incluso hasta grupos de gente joven, hasta casi llenar la sala, algo que me llenó de satisfacción y verdadera alegría...
Tras esta extensa introducción, y perdonen por la demora y la parrafada, a continuación la reseña en sí:
The Artist es una película francesa dirigida por Michel Hazanavicius. La historia ocurre en Hollywood entre 1927 y 1931, está rodada en una genial fotografía en blanco y negro, y también es muda. En la pasada edición del festival de Cannes dejó boquiabiertos y sin habla a la sala donde se proyectó.
El director Michel Hazanavicius ha estado fantaseando sobre la realización de una película muda durante muchos años, tanto porque muchos cineastas que él admira son del periodo mudo. Según Hazanavicius su deseo de hacer una película muda al principio no fue tomada en serio, pero después del éxito financiero de su película de espías OSS 117: El cairo, nido de espías (OSS 117: Le Caire nid d'espions) (2006), y su secuela OSS 117: Perdido en Río (OSS 117: Rio ne répond plus) (2009), los productores comenzaron a expresar el interés.
La formación de la narrativa de la película comenzó con el deseo de Hazanavicius de volver a trabajar otra vez con los actores Jean Dujardin y Bérénice Bejo, la esposa de Hazanivicius, que ya habían trabajado juntos en la primera película de OSS 117. Hazanavicius escogió el melodrama, porque muchas de las películas del periodo mudo que han envejecido mejor son melodramas. Él hizo una extensa investigación sobre los años 1920 de Hollywood, y estudió películas del periodo mudo para encontrar la técnica para hacer que la historia fuese comprensible sin necesidad de usar demasiados intertítulos. El guión fue escrito durante cuatro meses. La película fue producida por La Petite Reine y ARP Sélection con un presupuesto de 13.47 millones de euros, incluyendo el apoyo de coproducción de Studio 37 y France 3 Cinéma, y la investigación en pre-salas de Canal + y CinéCinéma. La filmación ocurrió durante siete semanas en diferentes localizaciones de Hollywood.
SINOPSIS:
Hollywood 1927. George Valentin es una gran estrella del cine mudo a quien la vida sonríe. Pero la llegada del cine sonoro le conducirá al olvido. Por su parte Peppy Miller, una joven actriz, verá impulsada su carrera a lo más alto, al firmamento de las estrellas.
Uno de los puntos fuertes del film reside en la interpretación de su reparto actoral, sobretodo la pareja protagonista, el actor francés Jean Dujardin y la actriz francesa, pero de origen argentino, Bérénice Bejo, ambos realmente impresionantes, construyendo unos personajes, que pese a no decir ni una sola palabra a lo largo del metraje, tienen su poso y sus matices, además que tienen una química bestial. Creo que estos dos actores, no muy conocidos hasta el momento, han realizado su mejor interpretación hasta la fecha, algo que les está reportando, sobretodo al galán de Dujardin, bastantes premios y nominaciones. De los secundarios me gustaría destacar al gran John Goodman, el genial James Cromwell, y una fantástica y desconocida Penelope Ann Miller (aunque su rol sea bastante corto). Mención especial la divertida actuación del perro.
Otra de sus puntos fuertes reside en la factura técnica de la película, simplemente es brillante, perfecta. Con un acertadísimo maquillaje y atuendos de los personajes. Una ambientación preciosa del Hollywood en las décadas de 1920 y 1930 con sus coches, carteles, cines, mansiones, etc... Una genial fotografía en blanco y negro, y incluso el formato original con el que rodaban en aquella época, que si no hubieran sido conocidos los actores, bien podrían habernos colado esta película como una rescatada de aquella época.
También merece una mención especial la espectacular banda sonora realizada por Ludovic Bource, que al carecer de habla los actores, es la que acompaña las distintas emociones de los personajes según el devenir de los hechos, llevando todo el peso de la historia.
Aunque lo mejor y más destacable de esta magnífica película está en su historia, que pese ha estar ambientada a principios del siglo XX, bien podría aplicarse a los tiempos de ahora, y más concretamente al mundo del cine con el susodicho debate de si el 3D es el futuro, al igual que en su día lo fue el paso del blanco y negro al color. El tema está en renovarse o morir, porque un día puedes estar en la cúspide, y al día siguiente puedes estar relevado al olvido. Muchos expertos dicen que el 3D es solo una moda pasajera, pero cabe recordar que maestros como Martin Scorsese o Steven Spielberg ya están utilizando la tecnología. Y ya no solo el debate del 3D, sino de los actores en general. Hay una frase que dice, si no me equivoco John Goodman, que decía algo así como "que el público quiere caras nuevas", y eso es algo que está pasando continuamente en el cine, sino que se lo pregunten a gente del talante de Robert de Niro, por poner un ejemplo, de protagonista absoluto y estrella del celuloide, a una mera caricatura autoparodiada. Y aparte del calado en su mensaje, en sí, es una historia de amor realmente muy emotiva, porque ella, pese a estar en lo más alto del estrellato, pudiendo tener a cualquier hombre comiendo de su mano, está enamorada (hasta la médula y desde el principio) de George Valentín, hasta incluso en sus momentos de decadencia y actitud autodestructiva.
Hay dos secuencias que me gustaron muchísimo, que también me gustaría destacar, la pesadilla de George Valentin, en la que sin banda sonora se empieza a oir todo el sonido de ambiente, menos su voz; y la secuencia del Bang!, simplemente acojonante.
Por contra esta vez no se me ocurre nada de nada que falle en esta obra de arte.
Como habéis comprobado leyendo esta reseña, me ha gustado muchísimo esta película, aunque no me ha gustado el trato cobarde que ha recibido en los cines españoles, disminuyendo el número de copias y no apostando por un producto único en su especie, toda una grata experiencia, si el espectador que la visiona se quita el sambenito de los prejuicios y manias. Huelga decir que soy de la generación de los ochenta, que ha crecido con las aventuras y fantasías de maestros como Spielberg, Lucas, Zemeckis, o Donner; por norma general no debería haber conectado con este tipo de cine, extinto hace ya un porrón de años. Tampoco es que sea fanático del periodo mudo, pero reconozco una obra de arte en cuando la veo, y aunque no sea un experto y carezca de conocimientos, siempre podré admirar la belleza de la obra, porque algo que está bien hecho, por norma general, está bien y debe gustar.
Para terminar me gustaría añadir que cuando se terminó la película, poco a poco la gente empezó a aplaudir (incluyendo un servidor), algo que no veía en una sala cinematográfica desde la tercera entrega de El Señor de los Anillos.
Me gustaría que este año los académicos Hollywoodienses se mojaran y que galardonasen a esta joya cinéfila con un porron de Óscars, que fueran valientes al igual que este gran director francés, Hazanavicius, que en pleno siglo XXI, dominado por el cine tridimensional, de superheroes y remakes, ha tenido la osadía de realizar una película muda, y en blanco y negro.
FICHA TÉCNICA:
- TÍTULO ORIGINAL: The Artist.
- DIRECTOR: Michel Hazanavicius.
- GUIÓN: Michel Hazanavicius.
- REPARTO: Jean Dujardin, Bérénice Bejo, James Cromwell, John Goodman, Penelope Ann Miller, Missi Pyle, Malcolm McDowell, y Ed Lauter.
- MÚSICA: Ludovic Bource.
- FOTOGRAFÍA: Guillaume Schiffman.
- PAÍS: Francia.
- AÑO: 2011