Renny Harlin creo que perdió el norte hace años cuando terminó con Geena Davis de eso hace mas de una década.
Y yo que con curiosa esperanza me pongo a ver este despliegue muscular sin límites, confiando en que no fuera la estupidez que presenta los dos primeros minutos. Termino la cinta entre bostezos de siesta infinita, aterrada pensando en que este es el futuro del cine.
Pues que empiecen a llamarlo otra cosa porque esto como cine es una abominación.