La receta de hoy procede del convento de las clarisas de Sevilla. Los vinos de Jerez se "clarificaban" (limpieza) con claras de huevo y los bodegueros solían regalar las yemas a los conventos de monjas, de ahí la gran cantidad de dulces que se hacen con ese ingrediente.
Yo recuerdo hacer tocino de soltera, cuando estaba en casa con todos mis hermanos que lo comían con gran placer. Más tarde dejé de hacerlo porque tenía otras prioridades. Sin embargo es uno de mis favoritos, que esta vez no he podido más que probar por cuestión de dieta.
Mi hermano ya está en La Coruña, han tenido una navegación cómoda y agradable. Mañana acometen la "Costa da morte". Yo espero unirme a ellos en Portugal, cuando no tenga que estar a expensas de los "controladores".
Espero que os guste.
Descargar receta escrita