Ingredientes
- Un calabacín mediano
- Un puerro grande
- Un diente de ajo
- Vino blanco
- Tomillo
- Pimienta
- Pasta Filo/Brick
- Queso
PasosLa receta es muy sencilla. Laminad el ajo y doradlo en una sartén. Limpiad muy bien el puerro para quitarle la tierra que pueda llevar entre las hojas y picadlo en trozos pequeños, cuando el ajo esté dorado añadid el puerro, ponedle un poco de sal y tapad la sartén con una tapadera. Mientras se esté haciendo lavad y picad el calabacín en dados pequeños, añadidlo a la sartén con un poco de sal.Yo lo dejé todo tapado a fuego medio-bajo, para que se hiciera poco a poco y además se quedara rehogado. Cuando esté todo bien cocinado añadid un poco de pimienta y un espolvoreado de tomillo. Dadle un par de vueltas y añadid medio vaso de vino blanco. Reducidlo todo bien y si hace falta añadidle un poco de sal. Dejad que se enfríe un poco.Ahora viene lo bueno. Si habéis comprado pasta filo tendréis que trabajar muy rápido, ya que se seca muy rápido. Cortad las tiras de pasta en bandas de unos 5-6 centímetros de ancho, poned una cucharada del calabacín y puerro cocinados y un trozo del queso que queráis en una esquina. Ahora id doblando hasta que tengáis la forma de un triángulo. Podéis pegar la masa mojándoos los dedos con agua y tocando la masa, se pega muy bien. Yo elegí un queso de cabra curado, porque era el que había en mi casa, básicamente, pero podéis probar distintos quesos para ver cuál le queda mejor. Cuando tengáis todos los triángulos hechos podréis hacerlos a la plancha con un poco de mantequilla, freírlos en aceite (en este caso de girasol para que no le dé mucho sabor), u hornearlos durante un par de minutos en el horno a unos 200ºC. Cuándo estén dejad que se enfríen un poco y a comer!!!Enjoy