Así que ya puedo gritar ese "Yay" (hurra) que os pongo en las fotos, casi no me lo creo ni yo, pero por fin llegó ese momento. Ya me atrevo a salir sola a la calle, que con los efectos secundarios del tratamiento ni podía, y otra cosita,... ya tengo ánimos para hornear!!!
El día que me puse a hacer estos cupcakes ya me dijo mi marido: "Estás mejor", y estaba en lo cierto. Publicar cada entrada no es fácil, lleva su tiempo escoger la receta, prepararla, montar un pequeño escenario para hacer sus fotos y esos pequeños vídeos que a mí me gusta hacer. Y para eso hay que estar bien.
Ahora toca cuidarse y disfrutar un poquito porque han sido unos meses duros y difíciles. Hasta mis hijos lo pasaban regular viéndome así, y eso que delante de ellos intentaba disimular al máximo, pero claro, cuando estás así de mal resulta complicado.
El caso es que ya estoy recuperada y llevaba tiempo queriendo estrenar estos vasitos tan monos con una receta especial, así que me decidí por estos cupcakes cuya base es el helado, yo lo escogí de turrón porque a mis niños les encanta ese sabor, pero podéis decidiros por el que más os guste, saldrán igualmente buenos.
Ingredientes:
Para los cupcakes:
* 600 gr. de helado.
* 210 gr. de harina.
* 15 gr. de polvo de hornear.
* 4 huevos.
Para el frosting:
* 1+1/2 taza de helado derretido.
* 1/2 taza de mantequilla sin sal, a Tª ambiente.
* 3-5 tazas de azúcar glas.
Preparación:
De los cupcakes:
- Sacamos el helado del congelador más o menos 1 hora para que se derrita, pero al punto de que esté cremosito.
- Precalentamos el horno a 180ºC y preparamos nuestro molde de cupcakes, bien engrasándolo, o poniendo nuestras capsulitas. O utilizamos unos vasitos ideales, que es lo que he hecho yo.
- En un bol tamizamos juntas la harina y la levadura.
- En el vaso de la batidora ponemos el helado.
- Añadimos los huevos, uno a uno, batiendo bien entre ellos a velocidad media-alta para que queden bien integrados.
- Ahora bajamos la velocidad de la batidora y vamos agregando la mezcla de harina y polvo de hornear poco a poco, hasta que nos quede una mezcla homogénea.
- Repartimos la mezcla en los moldes y hornearmos durante unos 20 minutos, o hasta que al insertar un palillo, este salga limpio.
Del frosting:
- En el vaso de la batidora con las varillas, batimos juntos el helado, la mantequilla y un par de tazas de azúcar glas.
- Vamos añadiendo más azúcar glas hasta obtener la consistencia deseada.
Pues ya me tenéis por aquí de nuevo, de momento me lo voy a tomar con calma porque además quiero disfrutar un poquito del verano con la familia, bastante mal lo hemos pasado todos. Pero poco a poco iré retomando la actividad normal y me tendréis dando guerra cada dos por tres. Muchos besotes y hasta la próxima receta.