El telescopio espacial Hubble nos brinda impresionantes vistas cósmicas todos los días, pero son imágenes sin sonido, os imaginais asignar un sonido a cada imagen, debe ser espectacular, pues se ha hecho. Aunque no hay sonido en el espacio, asignar tonos a las estrellas y galaxias en una imagen de cúmulos de galaxias proporciona una nueva forma de conceptualizar sus datos.
La frecuencia del sonido cambia de la parte inferior a la parte superior de la imagen, oscilando entre 30 y 1000 hercios. Los objetos astronómicos cerca de la parte inferior de la imagen producen notas más bajas, mientras que los que están cerca de la parte superior producen notas más agudas. El resultado es arrebatador.
Crédito: NASA / Hubble / SYSTEM Sounds (Matt Russo, Andrew Santaguida)
Las galaxias abundan en esta imagen adquirida por el telescopio espacial Hubble, podemos ver como los brazos espirales de muchas galaxias se arremolinan en todos los colores y orientaciones, y las elípticas difusas se pueden ver como manchas suavemente brillantes en el cielo. Cada zona visible de una galaxia alberga miles de millonse de estrellas. Un cúmulo de galaxias masivo se encuentra en el mismo centro de la imagen, una inmensa colección de quizás miles de galaxias, todas unidas por la fuerza de la gravedad.
Los cúmulos de galaxias son algunos de los objetos más interesantes del cosmos por la multitud de estudios que podemos obtener de ellos. Son los espectaculares nodos de la red cósmica que impregna absolutamente todo el Universo. Estudiarlos es analizar la organización de la materia en la más grande de las escalas. Los cúmulos de galaxias no solo objetos ideales para el estudio de la esquiva materia oscura y la curiosa energía oscura , sino que también permiten el estudio de galaxias mucho más alejadas. Su inmensa influencia gravitacional significa que distorsionan el espacio-tiempo a su alrededor, haciendo que actúen como lentes de zoom gigantes consiguiendo ver lo que hay tras ellas, es decir el universo más distante y temprano.