El anillamiento de las aves nos permite, entre otras cosas, descubrir bastantes cosas acerca de sus hábitos vitales, como por ejemplo la fidelidad a las áreas de cría e invernada en el caso de las aves migradoras. Un ejemplo muy claro de esto lo tenemos en las diferentes especies de gaviotas. Gracias a las anillas plásticas de fácil lectura y a su relativamente larga vida tenemos un buen conjunto de datos sobre ellas.
Una especie bien estudiada es la gaviota sombría Larus fuscus. En la playa de Bañugues, donde obtengo la mayor parte de mis registros de anillas, hay unas cuantas que pasan todos los inviernos. Una de ellas es 7A6, la cual detecté hoy por primera vez esta temporada.
Como digo esta gaviota es muy fiel a la playa de Bañugues para pasar el invierno. Hace dos temporadas la observé varias veces entre el 12/11 y el 19/12 de 2013, mientras que la temporada pasada la registré entre el 28/11/14 y el 06/02/15. Procede de la isla de Guernsey, en pleno Canal de la Mancha, a unos 700 km al norte de aquí. Allí fue anillada en la temporada de cría de 2011 por Paul Veron, uno de los anilladores más activos.
El tiempo que no está aquí este ejemplar lo pasa en su zona de cría, a la cual llega en marzo y permanece mas o menos hasta octubre. Es muy probable que el viaje lo realice costeando ya que hay varias citas en zonas costeras francesas.
Estas gaviotas sombrías que invernan en la costa cantábrica son las que menos viajan de todas las del islote de Guernsey, salvo unas pocas que lo hacen en la costa atlántica francesa. Ello puede suponerles una ventaja competitiva frente al resto.