Uno de los acontecimientos naturales de lo que llevamos de otoño en Asturias ha sido sin duda la llegada masiva de la mariposa vanesa Vanessa atalanta, producida en la segunda mitad del mes de septiembre. Primero en la franja costera, durante varios días estuvieron arribando incontables ejemplares de esta mariposa.
La mayor parte de los ejemplares mantenía el vuelo sostenido al llegar a la costa, pero algunos se detenían a alimentarse y reponer fuerzas, por ejemplo en las matas del brezo Erica vagans, en plena floración en esta época.
Unos días después de notarse en la costa el flujo se dejó sentir en los pasos de montaña, ya que las vanesas atraviesan Asturias rumbo al sur. Es complicado calibrar el volumen de este flujo, yo por ejemplo hice un conteo en intervalos de tiempo en un punto situado a espaldas de la playa de Xagó, con picos de 4-5 ejs./minuto pude estimar entre 500 y 600 mariposas en 3 horas sólo en este punto. En total no tengo duda que debieron pasar varios centenares de miles.
La fenología de esta mariposa es complicada en una latitud como la que se encuentra Asturias, donde hay vanesas prácticamente todo el año. Buena parte de las poblaciones son locales, y efectúan tan sólo movimientos de corto recorrido. Así, desde principios de septiembre se pueden ver concentradas en torno a dos fuentes principales de alimentación, por una parte las figares, donde liban el azúcar de los figos...
y por otro las flores de hiedra, que salen también en esta época y les encantan, en esta foto pueden apreciarse dos ejemplares. Lo que están haciendo estas mariposas locales es intentar acumular reservas ante el inminente periodo de hibernación que deberán atravesar a partir de noviembre, si la meteorología es normal.
¿De dónde vienen y a dónde van las mariposas migratorias que han pasado por aquí? Sólo podemos especular, aunque con bastante aproximación, gracias a la plataforma de ciencia ciudadana observado.org. Bélgica es un país donde está plataforma cuenta con miles de usuarios que anotan escrupulosamente sus registros, y esto es lo que se aprecia en la gráfica de la Vanessa atalanta después de transcurrido septiembre.
Como se ve, el salto este año 2021 es enorme, y aún a falta de un tiempo para su término. Si bajamos al detalle de la fenología anual lo podemos ver aún más claro.
Enfrentado este 2021 con un año anterior de números "normales" se aprecia lo que ha podido pasar, la llegada habitual de esta mariposa en primavera a la zona, con una primera cría realmente excepcional en el mes de julio, seguida por otra casi inmediata y abundante en septiembre. Lo mismo se repite si miramos la gráfica de Alemania, que omito para no cansar en exceso.
Es más que probable por tanto que este contingente de mariposas proceda del oeste de Europa, llegue aquí después de tomar rumbo SO, atravesando el Golfo de Vizcaya, y una vez en tierra tome rumbo sur, con destino al sur de la Península Ibérica y Norte de África. Ruta similar por otra parte a la que siguen un buen número de aves migratorias.