El fin de semana en Galicia, al menos donde yo vivo, se ha prestado sobre manera a la reflexión. Lluvia, lluvia y mas lluvia, una caída brutal de las temperaturas (el viernes rozamos los 25ºC y ayer domingo la máxima fue de 18ºC) y la desgana otoñal habitual en aquellos que tenemos la respiración en entre dicho, con una subida de la humedad de un nada despreciable 78% a un insoportable 95% ayer por la tarde. Para mí, el infierno hecho carne.
Lo dicho, tiempo para pensar, para un par de vinitos en compañía y para leer y preguntarse cosas. Por ejemplo ¿cual es la naturaleza de este juego?, ¿a que se ponen en entre dicho créditos personales y logros académicos en materia de vino?, ¿de que modo fueron obtenidos esos logros, quien los otorga, a santo de que se le dan a una u otra persona?, ¿es solo cuestión de dinero?, ¿que hace falta para que un vino sea tenido en cuenta por el publico mas interesado (no mas entendido)?, ¿que de snob tiene un vino que cueste 50 euros la botella, si gusto a una mayoría de interesados?, ¿y si cuesta 300?. Ya, ya... imposible.
O no. En los días pasados tuve oportunidad de probar un A Trabe de 2005. Es un gran vino, indudable. Todo en su sitio, exhuberancia frutal, corrección en la madera, acidez controlada. Nervio. Costaría mas de 45 euros, sin grandes estipendios y uno se pregunta ¿porque? Escasas botellas, distribución a todo el mundo mundial... negocio y capitalismo. Mayor demanda, menor oferta, subida del precio. Vale, pero ¿es justo? Yo supongo que, desde el punto de vista del consumidor, evidentemente, no. El buen aficionado, interesado en la cosa del vino, buscador, probador, serio, reflexivo, no merece que el poder o no acceder a un gran vino sea cuestión solo de dinero, pero así es. Mientras, al snob puro y duro, con dinero en el banco, el precio le da igual, lo prueba e incluso lo desaprueba porque "no sabe como tal o cual Rioja gran reserva que tomamos en casa de papuchi" (exageración para un mayor entendimiento de la premisa).
Pero ¿y desde el punto de vista de J.L. Mateo y Raúl Pérez?..Bien, esta claro que para ellos que el vino cueste 45 euros o los que sean será más positivo, ¿o no? Hace tiempo leí en una entrevista al gran Jean Claude Berrouet, enólogo de Petrus, que el dormía muy tranquilo en cuanto al precio que alcanzaba su vino (nunca menos de 1000 euros la botella) "de bodega sale a 300 euros" decía. A lo mejor habría que buscar la culpa del sobre precio en la persona de Christian Moueix, el "negociant" de los vinos de la bodega Bordelesa, o en un mercado loco, que sube hasta las nubes en función de que existan personas dispuestas a pagar por esa mercancía a ese precio. J.L. Mateo y Raúl Pérez deben ganar con A Trabe, esta claro, pero dudo mucho que ganen los 47 euros que llego a alcanzar su vino la navidad pasada. Y dudo también mucho de que la distribución de su vino ganase la diferencia ¿culpa del tendero, entonces?. No, de la suma de todos. Incluso del cliente. Pero sobre todo, culpa de una estrategia muy bien meditada y puesta en practica de modo casí militar. A eso vamos dentro de un rato...
Otra cosa son los vinos que no lo valen, pero... ¿quien dice si lo valen o no? Aquí podríamos utilizar el estilo clásico de la fabulación y el cuento. Todos lo vamos a entender y lo escribo desde el humor que espero se entienda en el texto siguiente;
"Los grandes críticos en la Web, Francisco Berjas, Víctor Serrano y José Petón han dicho al unísono que el recién salido Ribera del Duero "Pago de Matavacas Reserva de 2005" es probablemente uno de los mejores tintos embotellados en la historia de ESPAÑA¡¡¡. Los siempre atinados y nunca bien ponderados "gurús" se han manifestado con serias alabanzas. El Sr. Berjas ha dicho en su blog que "es sin duda una finca mítica, orientación sur-suroeste, de esquistos, guijarros azules y con un stress hídrico rayano en el maltrato de unas cepas milenarias". En términos similares se expreso Serrano, que en "Vendimia", el tradicional y meritorio foro de vinos, ha dicho que "de los mas de 600 Riberas que he probado este mes, este supera las previsiones". José Petón, mucho mas ponderado y meditabundo ha escrito en el editorial de su revista "Gourmetitos" que "es un vino estupendo. Tostados, almendras y hierba recién cortada. No es un Jerez, pero puede valer". La opinión unánime ha disparado el precio de este Ribera singular, del que solo se han hecho tres millones doscientas mil botellas, hasta alcanzar los 700 euros con 25 céntimos la botella. Un lujo al alcance solo de los muy preparados".
Y de los muy forrados, añadiría. Esta mini-opereta en clave de humor, espero que así haya sido leída, no pretende mas que dejar claro que se puede llegar a una situación curiosa ¿porque?. Para quien no haya descubierto el "meollo" del relato, solo añadiré que el Sr. Berjas era el principal distribuidor del vino, Serrano lo trabajaba en su cadena de tiendas y Petón publico más de dos millones de pesetas de publicidad de la ficticia bodega en su revista y en la guía subsiguiente, de edición anual. Evidentemente se trata de personajes ficticios "que no tiene relación alguna con la realidad" como se suele decir en las películas sobre "hechos reales". Al final, como todo en esta vida, solo se trata de negocios y en ese contexto debería ser visto y leído, absolutamente todo siempre. Aunque no se desee que así sea.
Sobre negocios se trata en el caso Pancho Campo MW, en el asunto de la cata de Garnachas de Parker y la INTERPOL. Parece una película de Esteso y Pajares pero no lo es. Es un negocio de dimensiones millonarias, implicaciones políticas y que ha dejado con las vergüenzas al aire a más de cuatro. Un asunto muy grave, mucho, que ofrece una versión de la parte mas alta de la pirámide de lo que el gran Camblor denomina "la cultureta del vino" muy distinta al paraíso de glamour y profesionalidad impecable, de catas a ciegas y honorables compromisos, que muchos tenían en el pasado. Al final, como en todo, negocio, forrarse a cualquier precio y prestigio ficticio, basado en historias de difícil confirmación y mitos personales. Curriculum con mas agujeros que mi cuenta corriente y una escasa, nula, percepción de la seriedad y la honradez. O al menos de los límites de ella.
Así que, y solo a modo de conclusión momentánea ¿es evitable?, ¿tienen sentido seguir en esta cansina lucha por el pequeño productor y la calidad de su producto?, ¿para que sirve hablar y hablar, escribir cientos, miles de palabras, sobre vinos que, a lo sumo, probaran 300 personas?, ¿porque creemos a determinadas personas cuando resulta evidente que seis de cada diez vinos que ofrecen y recomiendan son parte de su cartera o tienen relación clara con su modo de vida?. Y por ir aún mas allá ¿porque habría de estar mal esto ultimo?, ¿son menos honestos, menos fiables, menos objetivos?... ¿o no?.
Es indudable que el momento actual ofrece una posibilidad única, en al menos cincuenta años, para hacer viable que la mayoría de una población manipulada por los grandes capitales, entienda que existe, siempre a nivel de la cultureta del vino, una manera distinta de producir y comercializar vino. Más personal, más cercana y más honesta. Ahora bien, que esa manera nueva no esta representada en Wine Future Rioja es también un hecho. Ni en otras ferias similares. Ese "nuevo modo de beber" lo abanderan un puñado de aficionados, dos o tres profesionales con escrúpulos y una retahíla enorme de engaños, manipulaciones y operaciones de marketing que han provocado la ola de resentimiento suficiente para que existan mas de 200 blogs dedicados a hablar solo de vino. Es como para pensárselo ¿eh?
* Las fotos. La primeira en swag.blogspot.com y la segunda en www.detintos.com.