Un error común en la nutrición de la mascota es que se les alimenta utilizando la misma pirámide nutricional que se aplica, normalmente, a las personas.
Esta pirámide alimentaria necesita múltiples cantidades de cereales, fruta y vegetales diariamente. Nuestras mascotas, sin embargo, no deberían tomar, indudablemente, la cantidad de carbohidratos como la que podemos encontrar en esta pirámide (de hecho, los humanos tampoco).
Debemos ver los modelos típicos, ninguna propaganda nutricional está diseñada para vender alimentos envasados a base de carbohidratos. En la naturaleza, los caninos y los felinos, solamente, consumirían ocasionalmente (mínimas) cantidades de carbohidratos. En ningún caso, tomarían, en un solo día, porciones grandes y abundantes de almidones procesados (patatas, tapioca, cereales, azúcar, etc.).
Se ignora la sabiduría de la naturaleza y se sigue el despliegue publicitario que condena a las mascotas a ser portadoras de enfermedades degenerativas crónicas robándoles una vida saludable en plenitud.
La pirámide nutricional humana está basada en nociones erróneas como que los cereales procesados son una parte natural de la dieta de los humanos. Esto no puede ser cierto ya que los humanos, en la naturaleza, solamente comerían lo que pudieran encontrar en su forma cruda y los cereales (aunque pudieran encontrarlos en cualquier cantidad) son tóxicos en su estado crudo.
Esta mentira aplicada a las mascotas es todavía más peligrosa. Aunque algunos cereales procesados en la dieta, como parte de una alimentación variada está bien, hacer uso de ellos como en la pirámide de la alimentación humana es un camino seguro hacia la enfermedad de nuestros compañeros.
Saludogs
Carlos Alberto Gutiérrez Médico Veterinario Col.5950 Experto en Nutrición Canina