Revista Vino
En este templo de imposible digestión neoclásica, ofició hace unos días Baco redivivo. Es cierto (algún compañero lo ha hecho notar): llevaba unos zapatos curiosos, pero aún así, como a una de las reencarnaciones del dios me lo tomo. Si hasta lleva siempre consigo a un bondadoso y sabio Sileno...Vamos, que Joan Valencia y todo su equipo de Cuvée 3000 han vuelto a demostrar que se puede seguir creciendo, habiendo llegado ya a lo que uno veía como cierto límite: la 5ª edición de Vitis Vinífera. Esta 6ª edición ha cambiado y renovado expositores, ha mudado local (mucho más amplio y cómodo el vestíbulo del Teatre Nacional de Catalunya: pasaron más de 1200 personas y no sucedió nada grave), ha consagrado a la garnacha tinta (sin especificar más) como una de las uvas reinas de quienes marcan tendencias en el mundo del vino (Joan Valencia, José Peñín, Josep Roca, Víctor de la Serna, Juan Carlos López de Lacalle...) y sólo ha topado con un pequeño detalle que, a algunos, quizás pasó desapercibido: el día elegido. Un nodazo planetario acompañado de bajas presiones y temporal en Barcelona que, en mi opinion, perjudicó la cata de muchos vinos tintos presentes.
Me quedo con esa duda porque, la verdad, lo que había sacado como primera conclusión es que la mayor parte de blancos que probé tendían hacia la polifonía y a una mayor expresión de la peculiaridad de su uva. Por el contrario, los tintos tendían a una cierta monotonía y homogeneización, provocada por métodos de vinificación parecidos que acaban ocultando la expresión de la fruta y de su terruño. Con esa idea me fui. Probé, incluso descubrí, muchas más cosas interesantes en blancos que en tintos y veremos si eso se acaba convirtiendo en una tendencia. De lo que más me gustó: el monovarietal de xarel.lo de Mas Candi Desig 2009 (DO Penedès), muy floral, austero pero grande en boca, lo llena todo (* * ↑). La compañía de vinos Tricó (DO Rías Baixas) sigue a buen nivel con su Tricó 2009, un vino con acidez, manzana y muy vibrante en boca. Uno de los grandes del verano (* * ↑). De las Bodegas Puiggrós (DO Catalunya), me sorprensió su Sentits Blanc 2009, una garnacha blanca de viñas viejas con cuatro meses de madera que, en unos meses, estará grande grande (* *). Taleia 2009 (con un 13% de sémillon blanc) sigue siendo un vino de frescor impresionante (* * ↑). El Miserere 2006 de Costers del Siurana (DOQ Priorat) está llegando a niveles de Viña Tondonia catalán, no digo más (* * *).
El otro gran blanco del Priorat es, ahora mismo, el Pedra de Guix 2008 de Terroir al Límit (garnacha blanca, PX y macabeo) para un vino que ganará mucho con el tiempo (* * ↑). Es primo hermano de Les Calcinaires Blanc 2009 de Domaine Gauby: un vino de flor blanca pletórica, con limón, bella acidez en boca. Uno de los grandes de la sesión (* * *). Exactas sensaciones me dió el Cuvée "Le Cayrol" 2009 (con rolle y macabeo) de Domaine Majas: el poder de la macabeo y el frescor de la rolle dan un conjunto muy atractivo (* * *). Subiendo hacia el norte, uno no descubre nada si dice que los vinos de los Jobard estuvieron a gran altura, en esta ocasión un punto por delante su Mersault "Tillets" 2009 (sobresaliente su frescor y volumen: * * *). El mejor blanco de mi sesión lo descubrí en Mâcon-Villages, "Quintaine" 2008 de Domaine Guillemot-Michel, un vino con toda la tipicidad de la fruta, con frescor tropical, con acidez. En boca se amplían sus poderes y se abre como un abanico que todo lo cubre (* * * ↑). De los pocos rosados presentes, lo mejor sigue siendo el imprescincible Château de Pibarnon Rosé 2010, seco como nunca, con pomelo y lichy a raudales. En junio estará superior (* * *).
De entre los tintos, poco voy a destacar. Además del día y del clima, muchos son vinos para tomar dentro de unos años. La gente hablaba muy bien de los vinos de Mugnier pero mi nota literal es que todos estaban planos, tirando a vulgares (* ↑). De Luciano Sandrone, tres cuartos de lo mismo. Todos son vinos que necesitan años y días buenos. Sólo el Barolo Le Vigne 2006 estaba fino y largo (* * *). Me gustó bastante el Massuria 2007 de Mas Asturias (DO Bierzo), buena fruta y austeridad, cacao (* * ↑). No sé por qué pero algunos de los que mejor sobrevivieron fueron franceses: el Cuvée "Majas" Syrah 2009 de Domaine Majas (* *); la syrah "Champin le Seigneur" 2008 de Jean-Michel Gerin (* *) y, sobre todo, la syrah del Domaine du Coulet "Brise Cailloux" 2008, con una profundidad y una esbeltez especiada... (* * *). Los mejores tintos de mi sesión, con todo, fueron los de Juan Carlos López de Lacalle, de Artadi. Y ni tan siquiera puedo aconsejar que los compréis porque no sé cuando saldrán...El concepto, que ahora empieza ya a ser tendencia (sólo faltaba que el genio de López de Lacalle se apuntara), es embotellar por separado los vinos de cada terruño. Aunque no deje de presentar Pagos Viejos, empezarán pronto a salir botellas con los nombres de cada uno de esos pagos, ¡por separado! La muestra que tomé del Carretil fue sobrecogedora: esa tempranillo tiene una energía y una carga frutal que darán mucho que hablar (* * * ↑).