Xabi Larrañaga y Lara González, en la Copa de la Reina. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords.
Tiene un acento vasco muy marcado y unos ojos alegres que no se pierden ni el más mínimo detalle. “Es tan trabajador y luchador como cualquiera de nosotras. Con trabajo todo es posible”, le define Lara González, la base del Donosti Basket. Se refiere a su jefe de prensa, Xabi Larrañaga. “Está atento siempre a todo lo que necesitemos”, se suma Toch Sarr, máxima anotadora (13 puntos) en la derrota por 73-62 de un Donosti Basket que, por segundo año consecutivo, cayó eliminado de la liga Día en el tercer partido de cuartos de final, esta vez ante el Stadium Casablanca (73-62).
“En verano Carmen [Muguruza], la presidenta, me llamó para ofrecerme este puesto y no lo dudé. Acerté porque junté mis dos pasiones, el baloncesto y el periodismo, y por cómo es este club. ¡Una familia! Estoy sorprendido de lo cercanas que pueden llegar a ser las jugadoras a pesar de ser profesionales”, reconocía a Cronómetro de Récords Xabi Larrañaga antes de la eliminatoria de cuartos ante el Uni Ferrol. “Xabi se ha adaptado muy bien y no era nada fácil, pues Néstor Rodríguez, el anterior jefe de prensa, hizo una gran labor”, interviene Onintza Aduriz. “Realiza un gran trabajo en las redes sociales que nos permiten darnos a conocer más como club y para difundir nuestro día a día”, añade Azu Muguruza, la entrenadora. La técnica consigue eso tan extraño en el baloncesto: dar minutos y confianza a todo el grupo. Muguruza cree en la meritocracia y no se fija en los dorsales. Lo agradecen, sobre todo, las más jóvenes, como el caso de Sara Iparragirre y María Eraunzetamurgil. La segunda volvió a pista en un momento doloroso para Donosti Basket, pues su estrella, Lyndra Littles, se retorcía de dolor tras resbalarse sola. Después se supo que la tiradora estadounidense tiene una rotura de fibras en el gemeno. Lara González entró por Littles, y Nystrom se fue y apareció, Eraunzetamurgil, descarada y acertada para presentarse con un triple (47-52 a los 24m 55s). La réplica fue de la mejor de la noche, Pao Ferrari (29 puntos), que acertó con su sexto y último triple de 11 intentos. La escolta paraguaya es la gran estrella de un Stadium Casablanca que tiene varias. El año pasado Ferrari era la jugadora de referencia del Donosti Basket y, como Littles, tampoco pudo jugar los últimos minutos del tercer partido de cuartos de final. Entonces el vencedor de la serie fue un Uni Ferrol impulsado por Laquinta Jefferson. Seguro que a Xabi Larrañaga le comían los nervios por dentro viendo las pérdidas tontas de unas y otras, y cómo su equipo, entre el final del tercer cuarto y la mitad del último, estuvo 7m 48 sin anotar. En ese tramo sólo sumó la pareja Pao Ferrari-Gaby Ocete (58-54). De nuevo, como había pasado en la primera parte (15-9 a los 4m 43s o 39m 33s) se repuso el Donosti Basket. Le sobra corazón al conjunto vasco, penalizado a veces por ese espíritu y querer hacer las cosas demasiado rápido. “Se llevan muy bien todas. Hoy en la comida la hija de Iva [Brkic] se ha sentado con ella”, explicaba Xabi Larrañaga en la Copa de la Reina de Zaragoza. Era la primera vez que el Donosti Basket la jugó por méritos deportivos (en 2016 la disputó por ser el anfitrión) y su primera como jefe de prensa. Fiel a su estilo, a su trabajo silencioso, Xabi Larrañaga reparó en el equipo: “Sobre todo estoy contento porque estas jugadoras nos han dado muchas horas de alegría durante toda la temporada y tienen el premio de participar en la fiesta del baloncesto femenino, la Copa”. En Zaragoza el Donosti Basket compitió en semifinales y volvió a hacerlo hasta el final en los cuartos de final de la Liga Día. A 2m 36s Brkic puso el 63-61, justo después de otra mala selección de tiro de Italee Lucas. “No la perdamos a lo bobo. Si la perdemos, que sea con cabeza. Dejaos de rollos”, exigía Azu Muguruza tras el triple de Barbee. Su equipo ya no encontró respuestas y el Stadium Casablanca sentenció con tiros libres, la peor faceta de ambos durante la noche (13/21 las locales y 6/12 las visitantes). “Xabi es muy tranquilo, un poco tímido y un gran profesional. Se nota que hace su faena muy a gusto”, interviene Toch Sarr.“Es Pasión. Pasión por un trabajo. Por el oficio. El baloncesto femenino necesita gente como él”, describe el fotógrafo Luis Javier Benito. “Pues no sé si esto es una anécdota… En los viajes cortos para ir a jugar trae su coche. El club pone, por lo menos, dos coches, y viene para echarnos una mano. Siempre voy con él porque conduce muy bien y tiene un aparato para pillar todos los radares. [Se ríe]”, añade Toch Sarr. A la Copa de la Reina de Zaragoza también fueron en ese coche Onintza Aduriz —“fue un viaje muy ameno y divertido. Tanto que por un rato nos olvidamos de los nervios”— y —“nombramos DJ del coche a Xabi y estuvimos hablando un poco de la temporada y de la Copa”—. Arrate Deza, fiel seguidora del Donosti Basket, retrata con una precisión poética al jefe de prensa del Donosti. Sabe analizar muy bien a las personas: “Xabi es todoterreno e inquieto y me he cruzado tantas veces y en tantos lugares distintos (Iraurgi, categorías inferiores, hockey...). Es de esas personas que siempre te gustaría tener cerca. Un aliado en la aventura. Por conocimientos, por pasión...”. “Xabi es tan multiusos que hasta en un partido amistoso contra chicos se puso de árbitro. Entre tú y yo… Se le da mejor escribir las crónicas que arbitrar...”, cierra, con una carcajada, Onintza Aduriz.
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