Que no pone candidatos en Madrid y Valencia, que está esperando mucho, que es una falta de respeto a los ciudadanos, que blablabla…
Yo mismo pedí que se nombrasen ya los candidatos, me parece que el ciudadano tiene que tener tiempo para “catar” bien al candidato/a y que el propio elegible debe tener tiempo para expicarse bien. “Rajoy es un killer, los asa a fuego lento” me decían mis amigos, “Rajoy no tiene ni idea de quien poner” me decían otros, “Es Arriola el que dice que hasta 1 mes antes no hay que decir nada”, “Mira Cañete, vaya mal ejemplo de la estrategia de nombrar a última hora”, y así podría seguir con todo lo que me ha llegado por teléfono, watsapp, sms, etc.
Pero un amigo de la dirección nacional me dijo “hasta que no sepamos nada más de los temas judiciales que hay pendientes, no es oportuno sacar un nombre” y reconozco que le dí toda la razón, que me pareció lógico, pero seguí sin entender la situación.
El PSOE perdió su candidato, atropellado por el tranvía de Parla; IU (lo que queda de IU) perdió a la suya, a la cual “no le constaba nada” y Podemos se enredaba en un mar de facturas y donaciones encubiertas de Venezuela. Parecía que la oposición en Madrid se empeñaba en darle la razón a Rajoy.
Y tenía razón, porque esta semana estamos asistiendo al affaire del ático, a los problemas en Valencia y a una lucha sin cuartel por ver quién filtra más nombres para candidato/a al Ayuntamiento y a la Comunidad en Madrid. Si no sacas un nombre en el que nadie haya pensado…no eres nadie. Es más, si sacas un nombre que ya suena, pero no lo justificas con alguna ridícula idea del tipo “pone a fulanito porque su nombre atraería a tal colectivo y así ganamos esos votos” no eres tomado en serio.
Y Rajoy tenía razón, digo, porque lo que estamos viendo es que ni hay, ni habrá pre-campaña, tenemos un cisco judicial y mediático tan ensordecedor que si Rajoy hubiera nombrado un candidato/a se habría arriesgado a que lo imputasen, a que lo engullesen las peleas internas del partido, a que la oposición reaccionara con alguien que fuese mejor contrincante, e incluso a que todo el ruido de atrezzo que tenemos cada mañana, le dejase sin discurso propio y tuviera que ir a remolque del escándalo de turno.
Puede que tengamos candidatos en unas horas o en unas semanas, eso solamente lo saben Rajoy y los que irán de número 1, pero lo que si que podemos saber ya es que Rajoy ha templado el asunto aún cuando ha parecido que lo calentaba.
“Los asa a fuego lento”, no, lo que hace es soplar para que no queme cuando haya que comerlo.
Comparto con vosotros, queridos lectores (y lectoras) unos versos de Garcilaso de la Vega (muy al caso) sobre los Tercios en Flandes:
El temor enajena al otro bando;
el sentido, volando de uno en uno,
entrábase importuno por la puerta
de la opinión incierta, y siendo dentro,
en el íntimo centro allá del pecho
les dejaba deshecho un hielo frío,
el cual, como un gran río en flujos gruesos,
por medulas y huesos discurría.
Todo el campo se vía conturbado
y con arrebatado movimiento;
sólo del salvamento platicaban.
Luego se levantaban con desorden;
confusos y sin orden caminando,
atrás iban dejando con recelo,
tendida por el suelo, su riqueza.
Las tiendas do pereza y do fornicio,
con todo bruto vicio obrar solían,
sin ellas se partían; así armadas,
eran desamparadas de sus dueños.
A grandes y pequeños juntamente
era el temor presente por testigo,
y el áspero enemigo a las espaldas,
que les iba las faldas ya mordiendo.
César estar teniendo allí se vía
a Fernando, que ardía sin tardanza
por colorar su lanza en turca sangre.
Con animosa hambre y con denuedo
forceja con quien quedo estar le manda.
Como lebrel de Irlanda generoso
que el jabalí cerdoso y fiero mira,
rebátese, sospira, fuerza y riñe,
y apenas le costriñe el atadura,
que el dueño con cordura más aprieta;
así estaba perfeta y bien labrada
la imagen figurada de Fernando,
de quien allí mirándolo estuviera,
que era desta manera bien juzgara.