Esta ensenada parece un buen lugar para detenernos un rato, esto de volar con el viento en contra nos hace viajar muy pegados a la costa y es bastante cansado...
Además, parece ser un momento del día bastante tranquilo, en la playa sólo se ven gaviotas, algunos limícolas que seguramente están siguiendo la misma ruta que nosotros. Ah, y un humano que no parece peligroso...
Decidido, vamos a descansar un instante, primero a posarse en la orilla...
Y luego a repartirse, nosotros preferimos seguir en el agua, más frescos.
A mí, en cambio, me gustaría más posarme en esta pequeña piedra, así parece que descanso más a gusto.
Y sí es en compañía, mucho mejor...
Tú arreglate el plumaje compañero, que yo vigilo.
Aunque parece que esto está en calma, así que podemos hacerlo todos.
Bueno, creo que ya nos hemos ahuecado y despegado las plumas lo suficiente. Venga, al aire otra vez.
Tenemos hambre, y hay que acumular energías, aún nos queda un buen trecho, así que a pescar un poco.
Y a pescar
Y a pescar
En fin, parece que estamos todos satisfechos, así que es hora de continuar viaje. Hasta la vuelta, quizá volvamos a parar aquí.
Somos charranes patinegros. Llegamos esta tarde a la ensenada de Bañugues, 7 en total, aunque 2 de nosotros prefirieron seguir su periplo sin detenerse, quizá tienen más prisa, o puede que vayan más lejos. Al resto esta pequeña parada con comida y fonda nos ha venido de perlas, nos ha dado el descanso suficiente y hemos podido recobrar energías. Quién sabe, quizás gracias a ella podamos llegar sin novedad a nuestro destino, el lugar donde queremos establecernos una temporada. Gracias por todo, esperamos que sigáis conservando todo esto así por mucho tiempo.