Este de 2016 está siendo un año bastante lluvioso (por ejemplo en Luanco ya se llevan recogidos más de 500 mm de precipitaciones), y las charcas y humedales del concejo de Gozón tienen agua más que abundante. Este hecho lo ha aprovechado el pequeño zampullín común Tachybaptus ruficollis para instalarse en una de estas charcas y elegirla como lugar de reproducción.
Los pollos de zampullín, como los de muchas aves acuáticas, son nidífugos, y al poco de nacer ya abandonan el nido. En sus primeros días de vida van continuamente detrás de sus progenitores pidiendo comida casi sin cesar, por lo que el ajetreo de éstos es continuo.
Hace unos días estuve controlando a estos pequeños de zampullín, bien escondido detrás de los cañaverales y arbustos para no molestar. Pude ver que la familia constaba de tres pollos, uno bastante más pequeño que los otros dos, por lo que habrá nacido con unos días de diferencia. En el vídeo que les pude filmar se aprecia como esto no es obstaculo para obtener comida de su progenitor, simplemente se trata de ser más rápido que sus hermanos.
El zampullín requiere pocas condiciones para criar, tan sólo humdales con agua limpia para pescar y vegetación suficiente para poder pasar desapercibidos. Y por supuesto verse libres de molestias humanas. Si la primavera sigue al menos tan lluviosa como hasta ahora estoy convencido que esta pequeña familia conseguirá salir adelante.