Barcelona, noche de verano (2013)

La noche del 18 de Agosto de 2013 el cometa Rose cruzó el cielo de la ciudad de Barcelona, ofreciendo un espectáculo único que no volverá a repetirse hasta dentro de varios siglos. Bajo susurros o a pleno pulmón, empezando a florecer o dando sus últimos coletazos, esa misma noche hubo 567 historias de amor; nosotros te contaremos 6: Joan (Joan Dausà) ha organizado una cena y con la excusa del cometa ha invitado a todos sus amigos. Entre ellos está Judit (Sara Espígul), de quien Joan siempre ha estado enamorado, y el marido de Judit, Toni (Santi Ricart). Al mismo tiempo, Guillem (Francesc Colomer) de 13 años se ha enamorado por primera vez de Sara (Miriam Planas), que está convencida de que esta noche será el fin del mundo. En otro punto de la ciudad, Roser (Mar del Hoyo) está saliendo con Ricard (Peter Vives) desde hace un año pero hoy, con la llegada del cometa, se reencontrará con Albert (Marc García Coté), su ex. Mientras tanto, Laura (Bárbara Santa Cruz) y Carles (Miki Esparbé) están a punto de descubrir que serán padres. Paralelamente, Oriol (Bernat Saumell) y Adrián (Cristian Valencia) pondrán a prueba su amistad tras conocer a la chica de sus sueños, Chaterine (Alba Ribas). Y finalmente, Marc (Luis Fernández) y Jordi (Àlex Monner), dos jugadores de fútbol que se verán obligados a replantearse su secreta relación ante la posibilidad de ser fichados por el Barça.
Calificación: 7,082.
Tráiler de la Película
Ficha:
Título Original: Barcelona, nit d’estiu.
Director: Dani de la Orden.
Guionistas: Daniel González, Eric Navarro, Eduard Sola.
Intérpretes: Francesc Colomer, Jan Cornet, Joan Dausà, Mar Del Hoyo, Laura Díaz, Miki Esparbé, Sara Espígul, Luis Fernández, Marc García Coté, Àlex Monner, Miriam Planas, Jordi Pérez, Alba Ribas, Santi Ricart, Pau Roca, Mingo Ràfols, Bárbara Santa Cruz, Bernat Saumell, Marta Soler, Elena Tarrats, Cristian Valencia, Claudia Vega, Peter Vives, Laura Yuste.
Productores: Alberto Aranda, Andreu Buenafuente, Toni Carrizosa, José Corbacho, Kike Maíllo, Bernat Saumell.
Fotografía: Ricard Canyellas.
Música: Joan Dausà.
Montaje: Albert Gutiérrez, Elena Ruiz.
Dirección Artística: Eva Calviño.
Diseño de Vestuario: Nuria Sala.
País: España.
Lugares de Rodaje: Barcelona.
Fechas de Rodaje:
Año: 2013.
Duración: 76 minutos.
Edad: Apta para todos los públicos.
Género: Comedia, Drama, Romántica.
Estreno: 06-09-2013.
Distribuidora: Splendor Films, S. L.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España, Sitio Oficial.
Puntos Popularidad: 1 (0).
Espectadores: 0.
Recaudación: 0 €.
Crítica:
09-09-2013 – JOSU EGUREN
Treinta y tontos
Llegan los títulos de crédito finales de "Barcelona, nit d'estiu (Barcelona, noche de verano)" y no me apetece tomarme una caña helada. Es extraño, porque toda la película es una celebración de la estética patentada por los spots veraniegos de una conocida marca de cervezas, entre los que se inserta un pequeño mosaico de intervalos amorosos protagonizados por los sujetos de una generación X que ronda los treinta y tantos. Las preguntas de siempre, en torno al amor, la pareja, el compromiso y la guerra de sexos (el sexo), formuladas desde una apatía enmascarada por un prólogo en el que el debutante Dani de la Orden trata de empaparnos con una falsa vitalidad que parece imitar -o corromper- la estrategia autocompasiva de "Mapa", de León Siminiani.
Apetece coger las maletas para mudarse a una ciudad donde los problemas son el primer beso, sobrevivir a un viejo amor no correspondido o la paternidad aplazada, dilemas angustiosos para unos personajes vacíos que teatralizan sus miedos en escenas superficiales, si exceptuamos al que interpreta Joan Dausà (lacónicamente sobreactuado) y la pareja woodyalleniana formada por los espléndidos Miki Esparbé y Bárbara Santa-Cruz.
Son Esparbé y Santa-Cruz los que enderezan el rumbo de una de las microhistorias que mejor resume el espíritu de una película que se asoma varias veces al vacío sin atreverse a dar un salto dramático que alteraría el buen feelin' de una narración excesivamente acomodada. Una ópera prima -y testamentaria- en la que es fácil identificar las filias de un director que prefiere arrimarse al calor indulgente del público amigo, antes que correr el riesgo de herir sensibilidades contagiosas.
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