Ingredientes para cuatro personasOcho carrilleras de ibéricoDos puerrosDos tomates½ l de caldo de verduras250 cl de vino blancoDos dientes de ajoDos clavos de olorUna cucharada de cebollino picadoUna cucharada de tomillo1/2 cucharadita de granos de pimienta verdeSalPimienta molidaAceite de oliva
- Limpiamos bien de telillas y grasa superficial las carrilleras y las cortamos en dados como de tres o cuatro centímetros. Salpimentamos.
- Limpiamos los puerros y cortamos en juliana muy fina la parte verde de los mismos, reservando la parte blanca.
- En un recipiente adecuado ponemos la carne, el cebollino picado, los puerros y el tomillo y cubrimos con el vino. Dejamos tapado en la nevera toda la noche.
- Cuando nos pongamos a hacerlo, colamos el caldo del marinado y lo reservamos.
- Apartamos los trozos de carne, reservando también la juliana de cebollino y puerro.
- En una sartén con un chorro de aceite doramos bien los trozos de las carrilleras ligeramente enharinados y los pasamos a la olla exprés. Cubrimos con el líquido del marinado y con el caldo de verduras necesario para cubrir la carne. Añadimos los clavos de olor y dejamos cocer unos veinte o veinticinco minutos. (Comprobamos si está tierno, si no, dejamos otros cinco minutos más.) Retiramos y reservamos al calor.
- Mientras se va cociendo la carne, cortamos en juliana fina los ajos y la parte blanca de los puerros que habíamos reservado y los pochamos, en el mismo aceite en el que hemos frito la carne, junto con la juliana de puerro y cebollino del marinado.
- Cuando ya esté blando pero sin que se nos queme, retiramos el exceso de aceite, agregamos los tomates pelados y picado y la pimienta verde y rehogamos cuatro o cinco minutos.
- Añadimos un cacillo del caldo de cocción de la carne y dejamos, a fuego lento, hasta que reduzca.
- Comprobamos de sal y trituramos muy bien en la batidora, pasando la salsa resultante por el chino o por un colador. (Si nos queda muy espesa, añadiremos un poco del caldo de la carne, y si muy clara, dejamos reducir unos minutos. Ha de ser una salsa espesita, pero fluida, de esas que invitan a mojar pan...)
- Para servir, salseamos los platos y colocamos los trozos de carne sobre la salsa.