Revista Cine
De todas las joyas que se pudieron ver en el pasado Festival de Sitges, la que es la antepenúltima película del difunto director japonés Koji Wakamatsu, fue para el que esto escribe la mejor, más lúcida y coherente de cuantas se proyectaron. “Kyatapirâ” (2010) está muy libremente inspirada en un cuento de Edogawa Rampo, ya adaptado con anterioridad en la esplendida “Ranpo jigoku” (Akio Jissoji, Atsushi Kaneko, Hisayasu Sato y Suguru Takeuchi, 2005); pero si la película de episodios se decantaba por los aspectos más fantásticos del relato, en esta ocasión Wakamatsu y su viejo colaborador y camarada de aventuras Masao Adachi, junto con la colaboración de Hisako Kurosawa han elaborado un alegato antibelicista y antiimperialista cargado de morbo que devuelve al mejor Wakamatsu de los 60. La película resitúa la historia de Rampo en plena Segunda Guerra Mundial. A una anónima aldea vuelve, como un héroe, un soldado licenciado tras haber quedado totalmente mutilado de todas sus extremidades. Habiendo perdido también la facultad del habla, su única manera de comunicarse con su mujer será a través de su sexo. A partir de ahí la historia y la relación entre el matrimonio se irá deteriorando y pervirtiendo conforme el marido exija mas sexo a su mujer y esta, finalmente, use el hambre de él por las relaciones carnales para dominarle y maltratarle. El argumento vuelve a un tema querido por Wakamatsu y Adachi como es la relaciones de poder que se establecen a través del sexo , como ya habían hecho con anterioridad en la mítica “Taiji ga mitsuryô suru toki” (1966) o en “Okasareta hakui” (1967). Pero si en el pasado estas relaciones servían como metáfora del autoritarismo laboral o la alienación social, aquí se establece un doble juego de poder provocado por la propia guerra. El soldado, es recibido y aclamado como “el soldado dios” por sus ignorantes y sumisos vecinos, muy irónicamente representados por el tonto del pueblo como cabeza visible de este grupo, y por extensión representación de un Japón atrasado en todos los aspectos y rendido a la figura del emperador sin pensar en ningún momento en las consecuencias de sus actos. Unas consecuencias que llegaran a un final desgarrador tanto para el pueblo como para Japón. Este soldado, representante de una generación arrastrada a una guerra sin sentido, se transformará en una bestia humana, pero no a su regreso cuando vuelva convertida en tal, en esa especia de oruga humana, mucho antes, cuando en el frente chino cometa todo tipo de barbaridades y torturas. Ahí ya ha empezado el proceso de transformación en animal. Cuando tras su regreso del conflicto su transmutación este completa tanto a nivel físico como psicológico, lo único que le quedará será seguir comportándose como una bestia y como tal tratará a su esposa. Pero al igual que él fue transformado por el amor ciego a su país en un animal, su propia mujer poco a poco se verá seducida por el control que ejerce sobre él y los papeles se invertirán de manera dramática. La historia acaba de manera trágica, como acabo para Japón la guerra. Con una huella de dolor y locura, como consecuencias de un deseo incontrolado de controlar y conquistar. La conquista acaba siendo un fracaso, los conquistadores son tanto asesinos como víctimas en manos de fuerzas que no comprenden pero tampoco tratan de entender. No deja de ser llamativo que la puesta en escena y dirección de la película sean de gran fiereza y energía, sin llegar a los excesos de su etapa más celebrada, la película nos ofrece a un Wakamatsu en plena forma, lejos de algunos erráticos trabajos de los 90. Mención aparte merece el trabajo actoral, si la excelente interpretación de Shinobu Terejima le valió el Oso de Oro en Berlín, la tensa y dramática creación Keigo Kasuya, no se queda atrás. Una verdadera pena que Koji Wakamatsu nos dejase demasiado pronto el pasado 17 de Octubre ya que el cine perdió a uno de los más valientes y originales creadores que ha habido en toda su historia.
Alex Turol
Ficha Técnica
Año: 2010 Director: Kôji Wakamatsu Productor: Noriko Ozaki, Kôji Wakamatsu Guión: Hisako Kurosawa, Masao Adachi Fotografía: Yishihisa Toda, Tomohiko Tsuji Música: Sally Kubota, Yumi Okada Dirección Artística: Hiromi Nozawa Maquillaje: Akiteru Nakada FX: Takakimi Hashimoto, Fumie lida Efectos Visuales: Kazihiro Nishio, Masaru Tateishi País: Japón Duración: 85m. Formato: 35mm. Presupuesto: $120.000 Color Ficha Artística Shinobu Terajima, Keigo Kasuya, Emi Masuda, Sabu Kawahara, Maki Ishikawa, Gô Jibiki, Arata, Katsuyuki Shinohara, Daisuke lijima, Ichirô Ogura, Sanshirô Kobayashi, Mariko Terada, Ken Furusawa, Shima Ônishi