Revista Cocina
Hola de nuevo a todos!
Se fue el verano....llegó el otoño, ¡y junto a él regreso yo! Con más recetitas,por supuesto!
En estos meses de vacaciones, he tenido tiempo de cocinar alguna que otra cosilla,pero desgraciadamente no he podido actualizar el blog. Me dí un pequeño descanso,y ahora he vuelto con muchas cositas de mostrar.
¿Empezamos?
Sí....con algo clásico. Una tarta de queso y frambuesa, riquísima, para comer muy fresquita,acompañada de una bola de helado de vainilla ♥
Lo cierto es que mirando por internet,uno puede encontrarse con un sinfín de tipos de tarta de queso,desde las mas fáciles de hacer a las más elaboradas,con un toque de naranja,de limón,con nueces,con arándanos,cerezas.... A mí,lo cierto es que me gustan todas,pero sobre todo la tarta de queso con cerezas. Hoy no traigo esa receta precisamente,pero como también me fascinan las frambuesas,decidí hacerla con mermelada de frambuesa.
Creo que soy bastante pesada con la frambuesa....pero no lo puedo evitar. Hace tiempo reconocí abiertamente que soy adicta a todo lo que lleve limón, así que es un buen momento para decir lo mismo sobre la frambuesa.
No tengo remedio (:
Para la base:
280 g de harina
200 g de azúcar
1 huevo
100 g de mantequilla (mejor que usar margarina)
ralladura de una naranja
Para el relleno:
3 huevos
650g de crema de queso
400 ml de nata
200 g de leche condensada
ralladura de limón
Para la cobertura:
Mermelada de frambuesa
Elaboración:
Muy sencillo. Para hacer la base,sólo tenemos que mezclar todos los ingredientes,y amasarla con las manos hasta obtener una pasta consistente. Una vez hecha,sólo tenemos que extenderla cuidadosamente en el molde que queramos,y la metemos en el horno previamente calentado a 180º. Mantendremos en el horno hasta que la masa esté hecha.
Aviso:
Según el molde que utilicéis,puede que os sobre masa de la base. Esto es un poco a gusto de cada uno, porque a mí me gusta que la tarta de queso tenga una masa compacta y más bien gordita, así que utilicé toda la masa. Si la preferís más fina, utilizad la que queráis,y lo que os sobre podéis congelarla sin ningún problema.
Mientras se hace la masa,haremos el relleno. Lo primero es batir los huevos,y cuando estén bien batidos y espumosos añadimos la leche condensada,la ralladura de limón,el queso y la nata. Vamos batiendo hasta que esté todo bien mezclado. Creo recordar que no salió un relleno muy dulce, pero como la base lo es bastante y además hay que ponerle la cobertura,creo que mejor así a que quede demasiado empalagosa.
A continuación,echamos el relleno sobre la masa ya cocinada,y metemos en el horno el molde.
Esta tarta ,tarda un poquito en hacerse porque no hay que poner el horno demasiado fuerte,para evitar que la masa ya horneada se nos queme.
Después de paciencia,haber sacado la tarta del horno y cuando no esté muy caliente,echaremos por encima la mermelada previamente calentada para que nos resulte más fácil extenderla.
Y ya esta! Sólo debemos esperar a que la mermelada cuaje un poco,y ya podemos disfrutar de esta deliciosa tarta ♥
¿Os apetece un trocito? (: