Cocinamos 1 coliflor en ramitos durante unos 15 minutos. Retirarlos antes que estén totalmente cocidos, un poco duritos, ya que se terminarán de cocinar en el horno.
Salsa blanca: derretir la 30 gr de manteca, incorporar 30 gr de harina, revolviendo siempre para que no se queme. Añadir poco a poco 600 ml de leche caliente. Cocinar revolviendo siempre, hasta que espese. Condimentar a gusto con sal, pimienta negra y nuez moscada.
En una asadera o fuente de horno, colocar la coliflor ya cocida y cubrir con la salsa blanca. Espolvorear con 150 gr de queso parmesano, gruyere o semiduro rallado.
Llevar al horno a gratinar, a fuego bien fuerte, durante unos 10 minutos.