Revista Recetas
Cuando compramos pescado solemos pedir que nos lo limpien en la pescadería, un trabajo menos que hacer nosotros. Cuando llegamos a casa y lo vamos a cocinar, según que pescado, nos parece que no está del todo “limpio”, por ejemplo la pescadilla, merluza, rape, besugo, ...
Si, como habréis visto en la fotografía es esa fina piel negruzca que queda pegada en la carne del pescado. No es que de mal sabor ni nada, simplemente que puede que no nos guste verla o que una vez el plato elaborado quede ”antiestético”.
¿Cómo quitarla? Muy fácil, con papel de cocina. Un trozo de papel seco se pasa por encima de esa piel y sale enseguida y sin ningún problema.
Truco que si conocías habréis comprobado que es sencillo y fácil.
Si tenemos que limpiar el pescado en casa, no cuesta nada, si tiene escamas se las rascamos con el dorso de un cuchillo desde la cola a la cabeza, con unas tijeras cortar todas las aletas, abrir por la parte del vientre desde el orificio excretor hacia la cabeza y sacar el contenido, quitar las agallas, lavar rápidamente el interior con agua y secar. ¿Qué ese pescado tiene la telilla negra? Pues con papel de cocina frotar suavemente y pescado limpio y a punto para cocinar.