Compotas podemos hacerlas de muchos ingredientes, no solo de manzana, como de melocotón, albaricoque o pera, aunque seguramente sea la de manzana la más común.
Un detalle que la podría diferenciar de la mermelada sería, por ejemplo, la cantidad de azúcar a emplear en la cocción ya que, por lo demás, son muy similares, pero la mermelada suela prepararse con bastante más azúcar, llegando en algunas recetas a una proporción de 1:1, es decir, el mismo peso de azúcar que de fruta.
Con la compota vamos a tener un postre más saludable ya que, aunque las recetas también suelen variar, yo apenas le añado azúcar, y solo al final, tras comprobar si la necesita o no, ya que la manzana variedad Golden que vamos a usar ya es de por si dulce.
Compota casera de manzana
- Dificultad: Fácil
- Imprimir
Tipo de receta: Postres y meriendas
Tiempo empleado:
- Preparación: 5 minutos
- Cocción: 25 minutos
- Tiempo total: 30 minutos
Información nutricional por cada 100g. :
- Energía: 74,1 Kcal
- Grasas: 0 g.
- De las cuales saturadas: 0 g.
- Carbohidratos: 16,9 g.
- De los cuales azúcares: 16,1 g.
- Fibra: 2,6 g.
- Proteínas: 0,4 g.
- Sal: 0 mg.
INGREDIENTES:
- 1 Kg. de manzanas variedad Golden o Reineta
- 1 vaso de agua
- 1 rama de canela
- 1 cucharada de azúcar al final, solo si es necesario
PASOS:
- Mondamos 1 kg. De manzana variedad Golden.
- La troceamos menudamente.
- Calentamos 180-200 ml. de agua en una pota.
- Cuando rompa a hervir incorporamos los trozos de manzana.
- Bajamos el fuego a medio.
- Añadimos una rama de canela.
- Removemos bien y tapamos
- Cada pocos minutos abrimos la tapa y removemos algo para que no se pegue.
- Cuando alcance la textura necesaria, probamos.
- Si necesita azúcar le añadimos un poco.
- Fuera del fuego mezclamos, sacamos la canela y enfriamos en un bol.
Vamos allá con el paso a paso fotográfico, bien sencillo:
Vamos a tomar 1 kg. de manzanas Golden en este caso, aunque también servirían las Reineta, por su facilidad para la cocción. Ambas variedades son muy recomendables en repostería. Las lavamos bien.
Las vamos a pelar.
Una vez mondadas las vamos a descorazonar. Podemos usar un utensilio adecuado para ello.
Simplemente se introduce por una de las cabezas de la manzana, se pasa hasta el final y se retira dando un pequeño giro.
O también podemos cortar la manzana por la mitad y sacarle el corazón con un cuchillo pequeño.
Yo prefiero este método pues soy de la idea de que cuantos menos “trastos” usemos en la cocina, mejor.
Aprovechamos para sacarle bien la piel de las cabezas.
En este momento añadimos un vaso de agua, unos 180-200 ml. a una pota que nos coja toda la manzana y llevamos a hervir.
Mientras se calienta el agua troceamos la manzana.
Primero en cuartos y luego en trozos más pequeños. Cada gajo en tres.
Cuando el agua rompa a hervir ya estará lista para incorporar la manzana troceada.
Echamos los trozos de manzana con cuidado de no salpicar y quemarnos. En este punto podríamos incorporar también las mondas, ya que actúan como espesante natural, pero a mí no me gusta ya que no resultan fáciles de retirar después, al deshacerse parcialmente. Bajamos el fuego a la mitad.
Añadimos una rama de canela.
Mezclamos todo un poco.
Ahora tapamos y a fuego medio lo tendremos ahí unos 25 minutos, aunque iremos mirando cada poco como va y removiendo todo para que no se pegue al fondo.
Poco a poco ya vemos como se va deshaciendo la manzana. Aquí hay que decir que no todo el mundo quiere el mismo punto final. Hay quien prefiere más tipo puré y hay quien prefiere sentir pequeños trozos. A vuestro gusto. Tan solo es cuestión de dejarlo un poco más al fuego, controlando bien que no se pegue si la queremos más tipo puré. O bien pasar luego por la batidora.
A mi, personalmente, me gusta sentir algún rozo no deshecho por el medio, por eso no la dejo tanto. Cuando creamos que ya tiene la textura deseada la probamos para ver como anda de dulce.
En este caso le añadí una cucharada de azúcar.
Fuera del fuego mezclamos bien el azúcar y retiramos la rama de canela.
La depositamos en un bol pequeño y ya es cuestión de esperar un poco a que se temple o dejarla enfriar de todo, según vuestros gustos y el uso que le vayáis a dar después.
Ya veis que no tiene ningún misterio el preparar una compota casera de manzana en este caso.
Y muy sana ya que apenas lleva azúcar, aunque eso ya depende del gusto de cada uno y como esté acostumbrado a preparar la compota.
¿Cual es vuestra forma de prepararla?
Buen provecho internautas, nos vemos en la próxima.
Archivado en: Postres y meriendas Tagged: Azúcar, Canela en rama, Compota de manzana, Manzanas golden