Desayuno y colaciones

Para comenzar el día y romper con el ayuno que implica el período de sueño (durante el que no se recibe nungún alimento), debemos desayunar. El desayuno es un aliado para enfrentar la jornada con los depósitos llenos de glucosa, nuestro combustible energético.

Saltearse el desayuno me ayuda a adelgazar. FALSO
Un buen desayuno mejora el estado nutricional: aumenta la calidad de la dieta y provee una ración de muchos nutrientes. Además, ayuda a controlar el peso y mantenerlo dentro de límites saludables (las eprsonas que desayunan lo logran en mayor medida que las que no lo hacen), contrubuye a evitar el famoso "picoteo" (comer alimentos poco sanos fuera de hora) y mejora el rendimiento físico e intelectual.
No desayunar me hace sentir flojo el resto del día. VERDADERO
El desayuno es un hábito alimentario que llega a condicionar el estado físico, psíquico y nutricional en las personas de todas las edades. Salteárselo genera falta de concentración y decaimiento, además de un suministro inadecuado de calcio y vitamina D.
Largos ayunos me ahorran calorías para después. FALSO
Comer alimentos sanos con frecuencia diaria ayuda a mantener el metabolismo ocupado, gastando energía en dirigir las colaciones consumidas. Además, haciendo las cuatro comidas más dos colaciones (a media mañana y a media tarde) se llega con el apetito justo a cada una de las instancias. De esta manera, se evitan atracones o picoteos entre comidas.
Picotear entre comidas no es lo ideal. VERDADERO
Los picoteos no saludables (golosinas, papas fritas, chocolates, gaseosas o cualquier otro tipo de snacks) están directamente asociados al aumento de la incidencia de enfermedades crónicas no transmitidas, como la obesidad, la diabetes y las cardiovasculares.