Brihuega es uno de los municipios más bonitos de Castilla-La Mancha y gracias a la lavanda ha conseguido un atractivo más y en este mes de julio ha logrado aumentar el número de visitas turísticas a su localidad.
La verdad es que tanto los hosteleros de la localidad como diversas autoridades han dado un revulsivo a esta impactante floración para conseguir atraer a numeroso curiosos que se acercan a disfrutar de estos campos. La mejor hora para verlo suele ser el atardecer y el mejor momento en el mes de julio, por lo que ir fresquitos ya que normalmente rondan los 30 grados.
Por la afluencia de público que hay en los últimos años, han habilitado un aparcamiento para dejar el coche y poder recorrer estos maravillosos campos. Además, han instado una pequeña caseta donde se puede comprar diferentes productos realizados con la lavanda como geles, jabones, saquitos aromáticos, cremas…. En algunos establecimientos de la localidad también se pueden degustar alguna que otra receta a la que incluyen este ingrediente como cremas frías o postres.
Muchos de los curiosos que se acercan a disfrutar de la Toscana alcarreña lo hacen para realizarse fotografías. La mejor vestimenta para hacerlo y tener así un gran contraste es la ropa blanca, eso sí debéis tener mucho cuidado porque estos campos en julio están plagados de abejas y podéis llevaros algún que otro susto.Pero sí ya queréis disfrutar un poco más del campo os aconsejó que os acerquéis algún año al Festival de la Lavanda, se celebra un fin de semana de julio allí se realiza un concierto al atardecer donde se pueden disfrutar estos campos en todo su esplendor, eso sí comprar pronto las entradas ya que se suelen agotar rápidamente.