FICHA TÉCNICA:
Dirección: José Luis Cuerda
Guión: Manuel Rivas (novela)
Producción: Gerardo Herrero, Antonio Saura
Música: Sergio Moure
Casting: Camilla-Valentine Isola
Efectos especiales: Curro Muñoz (Supervisor)
Vestuario: Bárbara Delgado
FICHA ARTÍSTICA:
Fins: Quim Gutierrez
Mariscal: Juan Diego
Leda: Celia Freijeiro
Brinco: Miguel A. Silvestre
Malpica: Luis Zahera
Rumbo: Chete Lera
Sinopsis:
En el año 1969, junto a la costa gallega, la vida transcurre apaciblemente en torno al mar. Tres muchachos, Leda, Fins y Brinco pasan el día deambulando en espera de lo que les depare la suerte. A veces las olas traen cargamentos extraños, tesoros repentinos que provienen de los cargueros. Pero los habitantes del pueblo, comenzarán a dedicarse a su reventa o al contrabando: el negocio gira en torno a la figura de Mariscal, cacique local. Todo cambia cuando uno de los muchachos, Fins, se ve obligado a marcharse. A su regreso, veinte años después, pasado y presente se enfrentan.

La película nos presenta dos momentos en la vida de sus personajes. El periodo de la infancia, sin embargo, ya nos muestra los diferentes caracteres de los personajes principales, sumidos en una España de costumbres cerradas, en un mundo en el que nada es lo que parece. Destaca la figura paternal de Mariscal, que parece poner en marcha cada resorte del lugar. Una figura oscura que aprovecha su posición para lograr sus fines, se ha ganado el respeto y el temor. La vida de Leda, Fins y Brinco se moverá por el ambiguo vaivén de sus ilusiones enfrentadas a una realidad cotidiana de la que deben aprender: algún día no serán jóvenes y tendrán que desenvolverse.

Veinte años después, uno de ellos, Fins, regresa como miembro de la policía. Su objetivo es sacar a la luz el contrabando. Pero al reencontrarse con sus antiguos compañeros, descubrirá que no todo resulta tan sencillo: aquellas ilusiones y deseos de infancia chocan con una triste decadencia, con la imposibilidad de recuperar el pasado.

Hay una cierta simbología realizada en base a objetos cotidianos que de alguna manera buscan detallar los mensajes del film, como el de la vieja escuela en ruinas usada como lugar donde esconder la mercancía ilegal, que ejemplifica el fracaso social en una población que bien puede ser una metáfora de aquello que condena a las comunidades. Se trata de una película elaborada desde sus personajes, con muchos matices que explican el por qué del presente indagando en las causas del pasado. Y cómo las sociedades cerradas, plegadas sobre sí mismas, a veces tan solo esconden la miseria.