Ex Machina (2015)

Caleb (Domhnall Gleeson), un programador de 24 años que trabaja en la mayor compañía de Internet a nivel mundial, gana un concurso y recibe como premio una semana en la montaña privada de Nathan (Oscar Isaac), el hermético CEO de la empresa. Pero cuando Caleb llega al remoto enclave de Nathan, se entera de que en realidad ha sido seleccionado para participar en un arriesgado experimento relacionado con la inteligencia artificial... y con una hermosa mujer robot.
Calificación: 7,534.
Tráiler de la Película


Ficha
Título Original: Ex Machina.
Director: Alex Garland.
Guionista: Alex Garland.
Actores: Domhnall Gleeson, Oscar Isaac, Alicia Vikander, Corey Johnson, Deborah Rosan, Sonoya Mizuno, Chelsea Li, Evie Wray, Symara A. Templeman, Elina Alminas, Claire Selby, Ramzan Miah, Johanna Thea.
Productores: Andrew Macdonald, Allon Reich.
Fotografía: Rob Hardy.
Música: Geoff Barrow, Ben Salisbury.
Montaje: Mark Day.
Diseño de Producción: Mark Digby.
Diseño de Vestuario: Sammy Sheldon.
País: Reino Unido.
Lugares de Rodaje: Noruega, Reino Unido.
Fechas de Rodaje: De 15-07-2013 a Septiembre de 2013.
Año: 2015.
Duración: 108 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 12 años.
Género: Ciencia Ficción, Drama, Suspense.
Estreno: 27-02-2015.
DVD (Venta):
Distribuidora: Universal Pictures International Spain, S. L.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 40.615.
Recaudación: 249.882,22 €.

Crítica
04-03-2015 – JOSU EGUREN
Eva María
Cuando Mary Shelley aceptó la propuesta de Lord Byron y John Polidori poco podía imaginar que el primer esbozo de aquel personaje nacido en una noche de tormenta atravesaría dos siglos para inspirar los primeros pasos de la robótica cuántica («Una nueva especie me bendecirá como a su creador, muchos seres felices y maravillosos me deberán su existencia». 'Frankenstein o el moderno Prometeo', 1818). Condenado a la dirección tras la factura de guiones tan significativos como los de "Sunshine" (Danny Boyle, 2007) y "28 días después" (Danny Boyle, 2002), el debutante Alex Garland se contagia de los comentarios filosóficos expresados por el personaje amamantado por la escritora inglesa para alumbrar a una nueva Eva de la era robótica, el primer/último eslabón de una cadena evolutiva que plantea la posibilidad de que los cerebros-máquina se emancipen de la tutela de sus creadores. La literatura y el cine de anticipación con frecuencia se han hecho eco de un terror que hoy es cada vez más tangible, un peligro que tiende a concretarse en criaturas antropomorfas.
En el caso de "Ex Machina", el antropomorfismo de la máquina no es producto de la simple inercia y hace posible que las ramificaciones del guión encaren el tema de la identidad femenina heredando parte del ADN de la María ("Metrópolis", Fritz Lang, 1927) de Thea Von Harbou. Detenernos a listar un goteo inagotable de paralelismos (en lo estético su relación con "Beyond the Black Rainbow", 2010; de Panos Cosmatos, es más que evidente) nos impediría fijarnos en la intención de Garland de informar al espectador sobre una amenaza que se expresa en forma de parábola futurista, cuando en realidad forma parte de nuestro presente inmediato. Seguro de que el mejor marco posible para "Ex machina" es el de una puesta en escena minimalista, el director británico hace de la repetición un taladro para profundizar en su mensaje: el rostro de la mujer-robot de "Ex machina" es el de un Frankenstein depurado que nos alerta sobre la monstruosidad del Estado paralelo fortalecido por los avances de la revolución tecnológica.