Ingredientes:
- Medio litro de nada líquida (para postres)
- Tres tabletas de chocolate blanco
- 100 gr de azúcar blanco
- Cinco yemas de huevo (tamaño L)
Elaboración:
- Verter la nata en un cazo y poner a calentar.
- Troceamos el chocolate blanco y una vez hierva la nata, retiramos del fuego y agregamos el chocolate blanco. Remover bien hasta que se funda completamente.
- Separamos las yemas de las claras ayudándonos de las mitades de las cáscaras, donde, pasando la yema de una cascara a otra se va cayendo la clara. Batimos las yemas.
- En un bol mezclamos bien las yemas y con 50 gr de azúcar.
- Incorporamos esta mezcla con el chocolate blanco y removemos hasta que quede la nueva mezcla homogénea.
- Ponemos una pequeña sartén antiadherente a fuego medio y agregamos los otros 50 gr de azúcar a la sartén y removemos hasta que se derrita completamente. Podemos añadir más azúcar si lo vemos necesario. Una vez caramelizada el azúcar lo vertemos al fondo de la flanera o recipiente de horno.
- Incorporamos a la sartén la mezcla del chocolate blanco.
- Llenamos una bandeja o fuente de horno de agua (1 cm aproximadamente), asegurándonos de que quepa la flanera en su interior.
- Habiendo precalentado el horno a 200º, introducimos el conjunto en el horno habiendo tapado la flanera con tapa o papel aluminio. El tiempo de cocción va desde 50 min a 1 hora.
- Pasado este tiempo, retiramos la flanera del horno y dejamos enfriar a temperatura ambiente. No nos asustemos de lo poco cuajado que esté, ya que este proceso ocurrirá en la nevera.
- Una vez frío, introducimos la flanera en la nevera para que cuaje del todo, hasta el día siguiente (aunque se recomienda, si es posible, 48 horas).
- Al día siguiente procederemos a desmoldarlo ayudándonos con un cuchillo o espátula que pasaremos por los lados. Por lo general, al ponerlo boca abajo, se va desprendiendo poco a poco (paciencia en este paso).
Consejos y sugerencias:
- Si queremos acelerar el proceso para poder disfutar de este postre en el mismo día podemos recurrir a cuajada viendo, agregándola proporcionalmente a las cantidades que estamos manejando.