Hace tiempo que quería subir una focaccia, al fin me he decidido por traerla sin romero, que es la tradicional. No me acaba de gustar demasiado ese sabor tan profundo que comunica el romero a la masa, quizás no he encontrado el punto justo y tengo que poner menos cantidad. Como en casa somos muy de orégano, he elegido esta hierba para mi focaccia, también pude poner albahaca.
No os desaniméis con la masa, que es fácil, os lo digo de verdad, solo es ponerse un día con tiempo y probar. Voy a intentar explicaros cómo la hago yo, esperando que os salga mejor que a mí.
Ingredientes:
- Harina de fuerza para pan blanco 425 g.- Levadura seca de panadero 1 cda.- Sal fina 2 cdtas.- Orégano fresco o seco.- Pimienta negra molida ½ cdta.- Aceite de oliva.- Sal Maldon.- Tomates secos en aceite.- Aceitunas negras.
Elaboración:
Diluimos la levadura en cuatro cucharadas de agua templada y dejamos reposar cinco minutos.
Mezclamos la harina y la sal en un bol. Abrimos un hueco en el centro, echando en él dos cucharadas de orégano colmadas, cuatro cucharadas del aceite de los tomates, 240 ml. de agua templada y la levadura. Incorporamos lentamente la harina, llevándola hacia el centro en pequeñas cantidades y con las manos vamos uniendo los ingredientes.
Enharinamos un poco la encimera y pasamos la mezcla amasándola 8-10 minutos.
Aceitamos el bol y la dejamos dentro, resguardada de corrientes de aire (dentro del microondas o del horno) y tapada con papel film. Esperamos que suba 1½, 2 horas.
A continuación la ponemos sobre la encimera (algo enharinada) y la desgasificamos con algunos golpecillos de amasado. Dejamos reposar unos minutos, tapada con un paño.
Extendemos la masa en una placa de horno mediana (de no tenerla ocupamos con ella media bandeja grande) con las manos, procurando dar el mismo grosor y muy bien untada de aceite. Distribuimos las aceitunas y los tomates a nuestro gusto y en la cantidad que queramos. Abrimos orificios con un dedo. Volvemos a dejar crecer la masa en el horno, ahora cuarenta minutos. Sacamos la bandeja y encendemos el horno a 200 ºC.
Pasados los tiempos del levado pincelamos la superficie con más aceite de los tomates y volvemos a echar orégano y unas escamas de sal Maldon. Dejamos cocer quince minutos en el horno.
Servimos templada.