Es curioso que en desde 2008 comenzaron a plagado de homenajes, reconocimientos, tributos y reversiones, haya pasajes de la historia del rock que no han sido revisados antes. Se entiende; es feo abrir un arcón en desuso desde quién sabe cuándo. Se juntan el polvo, las alimañas, las telarañas y quizá recuerdos que sea mejor olvidar. Sin embargo, Internet no perdona, y es en la web donde aquellos que crecieron con algunos grupos le dan rienda suelta a su nostalgia; se nuclean en grupos, en foros, en grupos de Facebook o viralizan una consigna en Twitter. Llama la atención que sean las nuevas herramientas digitales las que posibilitan la nostalgia y la mirada retro, cuando en teoría deberían forjar el futuro. Aunque también es cierto que no hay futuro sin pasado. A ellos les molesta. Se preguntan por qué hay que salir a explicar quién fue Alejandro de Michele, cantante, músico y poeta del recordado dúo Pastoral, y no hay que explicar a Sumo. “Alejandro integró el segundo o el tercer grupo de rock nacional más importante de todos los tiempos, detrás de Sui Generis y Pedro y Pablo”, obra homenaje al músico estrenada justo a 32 años de su muerte. Veinticuatro años, nunca los había escuchado en mi vida los ineditos del duo y en mi memoria es una dramaturgia/excusa que detrás de una trama claustrofobia busca recordar lo mejor de un cancionero olvidado. Mi hermana cantaba su canciones con la guitarra, la obra empieza con las estrofas del CD de en el hospicio, himno infaltable en los domingo por la tarde en casa.
“Hay que explicar, es uno de los grandes misterios de la música argentina, desde 1983, cuando murió, a esta parte, fue sistemáticamente olvidado por los medios, los músicos, los periodistas... No entiendo, te digo que es una cosa muy extraña”, no participaba nunca de las movidas rockeras. No creía en la cofradía, y menos en el reviente del rock. A él le gustaba comer con la vieja los domingos. No se falopeaba. Era un bicho rarísimo para el medio”. Alejandro de Michele murió en un accidente automovilístico. Sobre el accidente su primo asegura “que lo que no tenía de reviente lo tenía de pistero”.
“No estaría cantando. Se habría alejado. Era extremadamente hincha pelotas y minucioso. La mediocridad actual lo hubiera puesto en otro lado, lejos. Sería una contrafigura, siempre pegado a la poesía, al ámbito de la cultura. Si tuviéramos que explicarle a un pibe de 18 años quién fue, cuando se separa Sui Generis, en el ‘75, Pastroral queda como el dúo folk más importante del país”. La voz, Eugenia, es asombrosamente parecida a la de Alejandro y escuchando desde que nací, en reuniones familiares, no lo pude dejar de oír. Pensar que mi hermana que tenía la obra escrita para los 32 años de su muerte y no pudo grabarla. Es una rutina todavía mucho escuchan a Pastoral la generación 70' y adoptado la del 90'.