La semana pasada salió un informe de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) en el mostraba que más de la mitad de las muestras de atún en conserva contiene una cantidad de mercurio superior a la que se considerada segura - más de 0.5 ppm de mercurio. Me preocupa porque el atún de lata me encanta. Y ahora ¿que hago? ¿tomo el mini-bocadillo atún de media mañana o no?
Pero, ¿cómo lo acumulan? De dos maneras: ya sea por la absorción de la piel o escamas del agua contaminada, o por el consumo de otros organismos que contienen mercurio. Dado que el atún blanco es pescado de tamaño más grande contiene más mercurio. Gran parte del mercurio que se encuentran en los océanos es de origen natural procedente de los depósitos minerales, de los emisores industriales y de los volcanes.
Según la EPA y la FDA, las personas de alto riesgo, incluidas las mujeres embarazadas, madres lactantes, mujeres que puedan quedar embarazadas y los niños pequeños, deben limitar su consumo de atún a dos veces por semana.
"El atún en conserva es seguro", dicen los expertos "Los consumidores deben confiar en que las conservas de atún sigue siendo una fuente segura y saludable de proteína sin grasa y ácidos grasos omega-3 los ácidos grasos". Lo que es cierto es que el contenido de mercurio en el pescado es muy variable del entorno en que ha sido pescado y su tamaño. Para desenredar este pequeño galimatias de la toxicidad por un lado y los beneficios por otro se plantea por parte de las autoridades que en las etiquetas se proporcione una información detallada sobre el contenido de mercurio y dar a explicar si ha sido pescado en una zona de riesgo.
Les puedo asegurar que yo seguiré tomando mi mini-bocadillo pero yo recomendaría a las madres embarazadas y que lacten tomar atún en esos períodos. El mercurio se ha relacionado con el autismo