Mi historia con los cupcakes.

Hace más o menos un año, mi amiga Mónica se había venido de Valencia al pueblo a vivir y celebró el cumpleaños de su hija. Nos invitó a merendar y allí que fuimos con la peque. Cuando llegamos había hecho unas magdalenas que me resultaron llamativas, y claro, me quede con la mosca detrás de la oreja.
Pasado un tiempo fui a ver a unos amigos a Toledo y en la visita al centro comercial entramos a una librería que nos gusta mucho que se llama ABAC y encontré una cajita pequeña como un cubo de los de rubik (creo que se escribe así), que incluía 6 moldes de silicona para magdalenas o muffins (que era el título del librito enano). Me compre el de las magdalenas y uno para hacer bombones. La verdad que les he dado un tute que para que.

Al empezar y querer hacerlas en cápsulas de papel, no me fue muy bien la verdad para que nos vamos a engañar. Se fueron para todos los lados. Pero un día, paseando por Tudela vi en una ferretería que vendían moldes. Así que entre y ¡¡¡¡SIIIIIII!!! Tenían bandeja para cupcakes, y con ella que me fui a mi casa. Y ahí empezó mi gran afición, y la tortura de mi marido.
Al principio solo hacia las magdalenas sin la buttercream, y la verdad eran buenísimas porque quedan muy suaves y esponjosas. Un día las lleve a una reunión que tenía en el cole y gustaron mucho. Así que me animé y empecé a investigar.

Mire por internet, en libros, tutoriales, bueno lo que todos hacemos. Y me lié la manta a la cabeza y me puse a hacer una buttercream. Madre mía en que momento.
La hice con una batidora de mano, con margarina y casi muero en el intento. Aquello era horrible. Así que lo dejé.
Pero de repente en el L´idl sale una oferta de una batidora. Ya lo conté en otro post una batidora de 25€ la cual va de muerte. Así que la primera prueba fue en casa de mi madre una masa de pizza para mi hermano. (Al que antes le hacía la masa de pizza en thermomix.) Bueno y salió muy bien. Así que la siguiente prueba fue la buttercream, y la verdad salió bien pero demasiado dulce. Mi vecino y mi marido que son dulceros a tope, se quejaron de que era demasiado. Jejeje igual me pase con el azúcar.
Así que otra prueba más, hice el azúcar glass en la thermomix, y la verdad no me gustó, quedan como arenilla en la buttercream. Así que cambié la mantequilla, el azúcar y poco a poco saque la buttercream perfecta. Que ahora puedo hacer con los ojos cerrados, jejeje. Creo que ya he hecho como 2000, más o menos.
Cada vez estoy más metida en este mundo, ahora he empezado con las tartas personalizadas, y ya están llamando a mi puerta las galletas decoradas. Así que poco a poco voy metiendo la cabecita en estas historias pero creo que al final voy a meter el cuerpo entero.

Para este fin de semana tengo otro pedido y voy a intentar hacer las minicupcakes, ya pondré el resultado para ver como me queda y si os gusta.
Espero ir poniendo todo lo que hago para que lo veáis y ojalá tenga mucho apoyo para poder sacar mi proyecto adelante.
De momento mi familia y mis amigos son mi mejor apoyo y por eso les doy las gracias. Les doy las gracias por su paciencia, por ayudarme cuando lo necesito, por probar mis postres, mis cenas. Y por todo. Porque este mundo no se sostiene si no tienes a tu familia, a tus amigos, en general a tu gente cerca.
Besitos para todos. Y como siempre feliz horneado.