Mucho que reflexionar tras la derrota en el Mundial de Turquía 2010

España ha caído eliminada ante la joven Serbia en los cuartos de final del Mundial de Turquía 2010. No es destacable el hecho de perder ante la selección balcánica, que nos ha vencido en 2 de los tres últimos encuentros, y que se postula (salvo lucha de egos) como la próxima dominadora del baloncesto mundial para la próxima década. Como si de una entrega de poderes se tratara, españoles y serbios se han visto las caras en Polonia y Turquía como hicieran yugoslavos y argentinos en 2002 y 2004 y de nuevo argentinos y españoles en 2006. La dominación mundial va por barrios y por épocas: Brasil en los 50 y 60, la URSS en los 60, 70 y 80, Yugoslavia en los 80, Estados Unidos y Lituania en los 90, etc. España apura sus últimos coletazos al fenómeno de los "Juniors de Oro" con cada vez menor presencia de la genial generación del 80 y 81 (en Turquía, sólo Reyes, Navarro y Raúl) y presenta sus respetos a la generación serbia del 87, 88 y 89 (Teodosic, Tepic, Bjelica, Markovic, Keselj, Macvan). La transición no debe ser brusca sino meditada y estudiada de manera que la incipiente cantera española vaya asumiendo las responsabilidades de cara a Lituania y Londres.
España sigue manteniendo un bloque joven con Marc Gasol, Rudy Fernández, Sergio Llull, Ricky Rubio o Victor Claver y parece que debe ser hora de que Álex Mumbrú y Jorge Garbajosa no sigan vistiendo la camiseta de la selección. Descartada queda la vuelta de Carlos Cabezas o Berni Rodríguez y Carlos Jiménez (ay, cuánto te echamos de menos) no volverá por decisión propia. Quiero deducir que lo de los últimos cuatro años debe quedar olvidado y trabajar de cara a preparar de nuevo a nuestra selección para afrontar al máximo las próximas competiciones. Hay que introducir de pleno en la selección a Victor Claver otorgándole un rol más acorde a las características del valenciano, a Sergio Llull hay que ubicarle en cancha, bien sea como base o como escolta y Pablo Aguilar es el cuarto pívot del país (considerando que Pau no volverá hasta los Juegos Olímpicos de Londres).
Pero si volvemos a 2006, lo que necesita está selección es devolver a la gente el sentimiento de "humildad". Los apodos de "ÑBA" nos han hecho pensar que España se encuentra en un punto en el que debe mirar hacia abajo para ver al resto de los combinados nacionales y cuando te caes de tan alto duele más. El apodo (obra del diario Marca) nunca ha tenido ni gracia ni funcionalidad. Las "giras" de la selección cada vez recordaban más a las que efectúa Estados Unidos y sólo nos falta llamar a los partidos como "exhibición" en vez de preparación. Se empieza a entrenar muy pronto y se acumulan partidos sin intensidad y con arbitraje y público a favor con el único objetivo de hacer caja y acumular victorias.  No se preparan jugadas o no se quiere aprender de ellas. España dispuso de dos balones decisivos en los enfrentamientos ante Eslovenia y Estados Unidos y ante Serbia, al igual que ante los norteamericanos, no se ejecutó nada. La preparación sirve para probar cosas: ¿qué tal un quinteto rápido y bajito con Raúl, Llull, Rudy, Claver y Fran? ¿Y si probamos el triple poste con Garbajosa, Felipe y Marc? ¿Son compatibles Vázquez y Gasol? ¿Tenemos más opciones de defender en zona que una 2-3? Como dijo General Espartero, ¿por qué España no ha ejecutado nunca el "piack and roll central" con Ricky-Fran o Navarro-Fran? Está claro que algo debe cambiar en la planificación y al menos en el banquillo. No culpo al 100% de la derrota a Scariolo porque los que están en pista son los jugadores, pero la sensación que ha dejado España tanto en la primera fase de Polonia como en todo el torneo de Turquía es preocupante y se necesita otro doctor para tratar al paciente. Tienen mucho donde trabajar desde la Federación.
No seré yo quién diga que este post no se puede tachar de ventajista u oportunista, ya que posiblemente pueda ser así. Muchas de estas consideraciones las tenía en mente ya desde que ganamos el Eurobasket de Polonia y era cuestión de tiempo que terminaran por explotar. Lo que nos ha aportado este grupo los últimos cuatro años ha sido maravilloso y si en Lituania volvemos a contar con Pau Gasol y José Calderón, las cosas deberían volver a su cauce. Pero si queremos que nuestro imperio baloncestísitico no entregue el cetro demasiado pronto a Serbia las cosas se deben meditar y tomar decisiones, aprender de los errores y mirar un poco al pasado, al oro de Japón y al BA-LON-CES-TO de Pepu.
PD: como muchos sabréis, este sábado y domingo se llevó a cabo el Primer Encuentro Nacional de Basket Blogger. Como estuve en Madrid hasta hoy y el partido y eliminación de España se me ha echado encima, os remito a los blogs de Jacobo, Mo Sweat, General Espartero, sraly y karusito83 para leer acerca del evento y disfrutar de fotos y vídeos.