Casi ha caído en el olvido ese guiso caldoso o esa sopa repleta de ingredientes con el congrio seco como protagonista que se elabora en una olla.
Plato que se consumía por Semana Santa, sobre todo el Viernes Santo, ya que se tenían que hacer ayunos y no se podía comer carne, este plato era consistente y adecuado para estas fechas.
El congrio, pescado seco y quizás un poco duro, se ponía en remojo con agua fría generalmente toda la noche para que quedara un poco más tierno.
Le acompañaban una serie de productos de lo más cotidianos, formando esa olla de congre o de congrio.
Ingredientes para 4 personas:
200 gr. de garbanzos cocidos
Un buen puñado de guisantes
Aceite de oliva virgen extra
Poner en remojo el congrio al menos 12 horas.
Separar las espinas que pudiera tener.
En una olla con un poco más de 1litro y medio de agua, poner los garbanzos cocidos lavados, las patatas cortadas a dados, de bocado, el congrio en dos o tres trozos, los guisantes y llevar a ebullición durante unos 30 minutos.
Añadir el arroz lavado, cocer unos 20 minutos o hasta que el arroz esté en su punto.
Mientras, laminar los ajos y dorarlos en una sartén con un poco de aceite.
Fuera del fuego añadir una puntita de pimentón, dar unas vueltas al calor del fuego. Reservar.
Poco antes de terminar la cocción, sacar los dos trozos de congrio, dejarlos templar, quitarles la piel, trocearlos, añadirlos a la olla de nuevo junto con el refrito de ajos y pimentón.
En lugar de garbanzos se pueden poner alubias.
** Así mismo se pueden añadir acelgas o las verduras que se quiera, hay muchas versiones de esta olla o escudella.
aseguraros bien de que todos los ingredientes sean sin gluten.