Y hoy la receta de V. de sus clases extraescolares, hoy si que los he probado y doy fe de que le han salido muy buenos.
25 ml de aceite de oliva virgen extra 75 g de pipas de girasol peladas 12 g de levadura fresca o 4,5 gr de levadura seca de panadero 8 g de sal fina (una cucharadita rasa de postre) 1 pizca de azúcar (media cucharadita de postre)Mezclamos la levadura con el azúcar y el agua a temperatura ambiente y lo integramos bien.
En un bol, tamizamos la harina y le añadimos el aceite, la sal, las pipas de girasol y la mezcla de agua y levadura.
Mezclamos bien con una cuchara hasta que todo esté integrado. Pasamos la masa a la mesa de trabajo y amasamos un poco más, dándole forma rectangular.
Extendemos la masa con un rodillo y después cortamos tiras de 1cm de ancho aproximadamente.
Vamos colocando las tiras en una bandeja con papel de horno. Si te gusta con más pipas. puedes poner unas poquitas por encima de cada palito, bien repartidas y presiona un poco con las manos para que queden bien adheridas. Horneamos a 200 °C durante 8-10 minutos o hasta que estén doraditos.
Dales el punto que más te gusten, más o menos dorado, pero procura que no se quemen, sobre todo si has puesto pipas por encima de los palitos.
Los dejamos enfriar para que queden bien crujientes.
Se pueden conservar en un recipiente hermético durante varios días.