Revista Cocina
Los días se alargan, las terrazas se ponen al día y empieza a apetecer pasar más tiempo al aire libre. Me encanta esta época del año. Después del letargo del invierno apetece salir, pasar tiempo fuera con la familia y amigos. Pasear, tomar el sol, parar en una terracita con encanto, me gusta que cada vez los locales no solo se preocupen por su interior sino por su exterior, y tomar un aperitivo. Charlar animadamente mientras los niños corren y juegan siempre a nuestra vista…
Y para poder disfrutar de todo esto, toca preparar platos rápidos, con un toque fresco. El plato que os traigo no parece rápido, pero lo es. La masa del pan la podéis tener preparada, estirada y guardada en la nevera, con cuidado de poner un papel antiadherente entre cada pieza. La sacáis un rato antes de preparar la comida para que se atempere, y ya está. Y el pollo, como tiene que estar en adobo, lo tenéis que tener hecho con antelación.
Total, que en menos de media hora estaréis disfrutando de este plato. Y hablando de lo que habéis hecho durante el día, o haciendo planes para la tarde o el día siguiente….
Como me gustan los fines de semana….!!!!
INGREDIENTESPara el pollo adobado:
2 pechugas de polloAjo en polvoPimienta negra recién molidaUna cucharadita de comino molidoPimentón de la Vera (dulce o picante según gustos)100ml de vino blanco30ml de vinagre de vino blancoSalUn poquito de agua
Para el pan plano:500 g de harina normal200 g de agua100 g de yogur natural15 g de levadura fresca2 cucharaditas de sal
AguacateSalCilantroZumo de una limaCebollas en vinagreta (receta aquí)Aceite de oliva virgen extra
ELABORACIONEl día de antes pondremos el pollo en adobo. Para ello cortaremos las pechugas en dados medianos. Las pondremos en un bol y las sazonaremos generosamente con el ajo molido, la pimienta negra, el comino, el pimentón y sal. Yo las muevo con los dedos asegurándome de que quedan bien impregnadas. Añadimos el vino blanco y el vinagre y acabamos de cubrir con un poquito de agua. Tapamos y dejamos en la nevera hasta su preparación.
Para el pan plano, desmenuzamos la levadura y la mezclamos con el agua tibia. En un bol grande, ponemos la harina, añadimos el yogur y la sal y mezclamos bien. Agregamos la mezcla de agua y levadura y comenzamos a amasar. Amasamos o bien a mano (unos 10 minutos) o con amasadora (5 minutos) hasta que la masa esté fina y elástica.Hacemos una bola, pintamos un bol de aceite y dejamos que doble el volumen, tapándola con un paño de algodón.
Volcamos la masa sobre la superficie de trabajo, sin enharinar, y dividimos en cuatro porciones. Estiramos cada porción con un rodillo, de la forma que más nos guste, yo las he hecho un poco ovaladas. Deben de tener más o menos el grosor de una masa de pizza.
Ahora ya podemos preparar el plato. En una sartén ponemos un poquito de aceite de oliva y sofreímos a fuego medio los dados de pollo. En otra, ponemos unas gotas de aceite y cuando esté bien caliente ponemos el primer pan. Lo hacemos hasta que se comience a hinchar un poquito y este dorado. Le damos la vuelta y dejamos que se dore también. Repetimos hasta hacer todos los panes.
Troceamos el aguacate y lo aliñamos con sal y el zumo de la lima. Servimos el pollo sobre el pan y acompañamos con cilantro picado, aguacate y unas rodajas de cebolla en vinagre.