Recetas saladas para desayunar

En otro post les compartí ideas dulces y saludables para desayunar (o cenar), pero cuando el antojo es comer algo salado también hay muchas opciones.

Soy fan del jamón serrano y me encanta el pastrami pero los como muy de vez en cuando. La idea no es torturarme dejando de comer algo que me gusta porque no es saludable -y de paso torturarlos a ustedes-, sino compartirles ideas deliciosas para inspirar su creatividad y darle variedad a su alimentación.

Ninguna de estas 5 ideas tiene carnes frías o embutidos y la verdad es que tampoco las necesitan: así son ricas.

1. Tacos de huevo con salsa verde.

Yo soy fan de las verdolagas, pero si no las encuentras puedes sustituirlas por otra cosa verde que te encuentres: quelites, espinacas, acelgas, berza/kale, huauzontle, rajas de poblano …

2. Sopes al comal.

Puedes utilizar lo que tengas: frijoles de la olla o machacados. Si no tienes frijoles pero sí lentejas cocidas o hasta una sopa bien espesa de lentejas o habas, queda igual de rico.

Yo tenía un poco de requesón y nopales cocidos y pues para aprovechar #ReciclaTuRefri.

3. Sándwich de requesón y aguacate.

Puedes utilizar queso panela o requesón y sustituir la mayonesa por jocoque. Para el toque picosito, una untada de chipotle (puedes moler una lata de chiles chipotles adobados, guardarla en un recipiente de vidrio en el refrigerador).

Si tienes rebanadas de pepino (con cáscara) o jitomate, le dan un toque jugoso y súper rico.

La combinación queso + aguacate = deliciosa. Gracias a @pachecoceci por la idea

4. Sándwich abierto de berenjena

Desde que redescubrí las berenjenas, me he hecho súper fan: cocidas tienen un textura súper cremosa, un sabor suave que combina con todo y una consistencia deliciosa. Pronto subiré recetas.

Para que no queden amargas, rebánalas y espolvorea un poco de sal. Después de unos 20 minutos vas a ver unas gotitas en la superficie: enjuágalas y sécalas. Ahora están listas para asar en un poco e aceite de oliva.

5. Quesadillas al comal.

¿Conocen Delicias de la comida prehispánica del Dr. Alberto Peralta? Buenísimo. Explica que el origen de la palabra quesadilla es español del siglo XVIII y que significa tortilla doblada por la mitad que puede estar rellena de diferentes guisados o de queso, además de que la palabra quetzaditzin que ha estado circulando en facebook ni existe, #PorSiOcupan … jaja.

Después de este breviario cultural

y para evitar la confusión, les propongo dejar de rellenar las quesadillas sólo de queso para usar otras opciones: guarniciones de la semana y con frijolitos machacados, o la clásica de queso pero con un toque verduroso.

En esta yo utilicé champiñones, espinacas y jitomate deshidratado que me sobró de una pasta. Sí, es el reciclado, del reciclado

6. Molletes “de volada”.

Hacer los molletes en una rebanada de pan de caja integral, no es lo más gourmet ni ortodoxo del mundo, pero sí más práctico para cuando andas con prisa en la mañana. Yo le cambio el queso panela por unas rebanadas de aguacate y ¡uff!

Entonces la fórmula mágica queda como sigue:

Pan tostadito + frijoles + jitomate rebanado = mollete “de volada” (o sea, rápidos).

Pero la verdad es que pueden hacer lo mismo (y queda igual de rico) si utilizan una tostada de maíz, de esas que son horneadas.