Una receta marca de la casa, un plato de pasta tan veraniego como de entre temporadas, el hecho de servir este plato de Rigatoni con guanciale al pesto rojo y bocconcini con productos a distintas temperaturas, lo hace ideal para los días veraniego, además, es fácil de hacer, se prepara rápido y en un plis plas has comido y tienes todo recogido.
Queda claro que esta receta puedes hacerla con el tipo de pasta de tu preferencia, ahora bien, la proteína, o sea el guanciale, puedes sustituirlo por panceta o con papada de cerdo ibérico irás de lujo, el pesto rojo, por favor no lo cambies y en cuento al queso, la primera opción fue usar burrata, pero las bolitas de mozzarella quedan muy bien y hace el plato más económico aún. Estos uova di búfala o "huevos de búfala" como también se les conoce a las bolitas de mozzarella, los pondremos fríos sobre el plato de pasta terminado, esto nos refrescará mucho la receta, claro que puedes gratinarlos, pero es que en este día de calor no quise poner el horno, y mira tú que bien nos quedó.
Muy pocos ingredientes, poco tiempo para hacerlo y mucho para disfrutar de un platazo, sencillo, pero lleno de sabor, otra manera de comer pasta a una temperatura de agradecer. Nada más que agregar, manos a la obra... De arte hecha plato.
RECETA Nº 422 - RIGATONI CON GUANCIALE AL PESTO ROJO Y BOCCONCINI
INGREDIENTES
PREPARACIÓN
1. Ponemos una olla con bastante agua y un puñado de sal para cocinar la pasta, sigue las indicaciones del fabricante. Los rigatoni suelen cocinarse entre 12-16 minutos.
2. Mientras, en una sartén, calentamos el guanciale cortado en dados a fuego medio fuerte hasta dorar.
3. Cuando el guanciale esté dorado, apagamos el fuego, añadimos el pesto rojo y salteamos para mezclar bien.
4. Agregamos la pasta que ya debería de estar cocida y seguimos salteando para mezclar bien la salsa y la pasta. Es posible que tengas que añadir una o hasta dos cazos del agua de cocción de la pasta, tu eliges de que densidad quieres la salsa.
5. Servimos, agregamos unas bolitas de queso a cada plato, rociamos algo de orégano seco por encima y terminamos rociando un chorro de aceite de oliva virgen extra por encima.
Déjame decirte que esta misma receta queda espectacular con un Pesto alla genovese o pesto verde, pero es que el pesto siciliano es una debilidad personal. Ahora, como ya comentamos antes, tienes varios quesos a elegir si quieres hacer esta receta, bien los bocconcini como hemos usado esta vez, romper una bola de burrata encima de tu pasta es vicio puro, mozzarella fresca rallada o incluso cualquier queso fresco cumplirá su función, es decir, tener queso en el plato y que se pueda comer frío además de refrescar nuestro plato. Termina el plato con una hoja de albahaca fresca y lo bordas.
Si quieres un poco de "alegría" en tu plato, rocía un poco de peperoncino picante al servir, más de uno te lo agradecerá, a no ser que hayas "tuneado" tu aceite de oliva a picante, en ese caso, déjame extenderte mi enhorabuena.