Holi vagas del lugar, quiero enseñar a hacer romescu casero, sé que es muy fácil abrir el bote y untar, de hecho casi siempre lo he hecho así pero hace poco mi querida Claudia me enseñó a hacerlo en casa y la verdad es que es bastante fácil. Apunta cómo hacer romescu casero.
¿Qué es el romescu casero?
Quiero aclarar que romescu no es romancescu, el romancescu es de mi familia de verduras favoritas, las crucíferas. A esta familia pertenecen el brócoli, las coles de bruselas, la lombarda, las alcachofas y ya paro de hablar que estoy babeando. Sólo diré que todas ellas están compuestas por fractales, que son patrones matemáticos que se repiten una y otra vez, por algo será.
Lo primero que conviene hacer es esperar a que sea verano para hacer romescu, esa época maravillosa del año en la cual los tomates saben a tomate de verdad y los hay feos, deformes y llenitos de agua, casi que se deshacen en la boca, con esos sí te saldrá un buen romescu casero. Si no eres capaz de esperar a que sea verano puedes usar los que hay ahora, que están hechos de plástico, abonos, fertilizantes con su ionización y tal, procura que sean ecológicos para ahorrarte movidas.
¿Qué lleva la salsa romescu?
Receta de:Cristian
Una vez tengamos tomates, sólo hay que meterlos al horno enteros. Sí, enteros, sin cortar, sin pelar ni nada de nada, sólo hay que lavarlos y meterlos al horno junto a una cabeza de ajos también entera, sin abrir ni hostias. Dependiendo de el tamaño de los tomates habrá que dejarlos más tiempo o menos, pero échale que media hora seguro que tienes para entretenerte haciendo algo que te guste.
Una vez los tomates parezcan bien cocinados, estén blanditos y se empiecen a abrir, se sacan del horno y se meten en un vaso para batir, yo los meto enteros, no le quito la parte que los une a la rama ni nada, estoy así de loco. Con los ajos hay que hacer lo mismo, pero estos sí los pelo, puede parecer que una cabeza entera es una locura y que va a saber muchísimo ajo, pero lo cierto es que al cocinarlo se convierte en un sabor muchísimo más suave, puedes ir probando.
En el vaso para batir hay que añadir almendras supuestamente, como yo no tenía utilice semillas de calabaza y quedó más rico si cabe, se añade un chorrito de limón, un poco de pimentón ahumado, orégano, sal y aceite de oliva y se bate a velocidad considerable.
Esta salsa es muy peligrosa, una vez hecha, ten cuidado si vives con gente porque está tan rica que seguro que no dura más de unas horas y te entrarán ganas de mojar en ella hasta las galletas.
Esta receta queda genial para comer con verduras al horno, está tan rica que más bien comerás romescu con verduras. Una muy buena opción es hacer calçots o puerros al horno, que tienen más contenido, como en esta receta.
Espero que te mole, que te haya picado el gusanillo y que te pongas a hacerla, que está riquísima!
Muak