La primera vez que probé los scotch eggs fué en un curso para ejecutivos en Inglaterra hace un montón de tiempo.
La verdad es que me encantaron aunque no era la comida mas adecuada para pasar después a una sesión de cuatro horas de workshop…pero era un curso tan divertido que siempre he asociado estos Scotch Eggs con algo alegre y motivador.
Del curso salí con mis skills mas que reforzados y en el avión de vuelta a Madrid decidí adaptar la versión clásica de los Scotch Eggs a la madre patria- España- y hacer mi versión castiza de los mismos.
Yo es que soy muy de mi tierra…de mi Madrid…asi que al igual que “el hombre lobo en Paris”, yo me inventé los “Scotch Eggs en Madrid” Ya sabeis:
“La luna llena sobre Madrid
Ha transformado en madrileño a Scottish
…el Scotch Egg está en Madrid…
su nombre Denis..”
Vamos, que ¡vaya arte tengo!…y ¿cómo se tranforma un Scotch Egg en un Scotch Egg spanish versión? pues dejándote de mezclas especiadas y variadas y recurriendo a las increiblemente buenas longanizas que tenemos en este país.
Os dejo aqui la receta para deleite general …¡Ah y podeis prepararlos con huevos de gallina (como en mis imágenes) o con huevos de codorniz, porque de las dos formas están increíbles!!!.
Receta (Para 6 personas)
6 Huevos + 1 para el rebozado
Longaniza fresca blanca al gusto y poco picante (yo la compro en bandeja en el supermercado, es la que en crudo tiene color rosado)
Pan rallado para empanar
Cuece los huevos hasta que esten duros. Quítales la cáscara y resérvalos.
En un plato bate un huevo y en otro plato pon pan rallado para rebozar.
Prepara la longaniza formando un montoncito sacándo la carne de longaniza de las vainas en las que viene.
Extiende parte de esta masa en la mano y pon el huevo duro en el centro. Vamos a poner la longaniza alrededor del huevo y formar una bola. Prepara todas las bolas y una vez termines rebozas cada una de ellas dos veces de la siguiente manera: primero lo pasas por el pan rallado, a continuación por el huevo y nuevamente por el pan rallado. Asi quedará mas crujiente.
Una vez listas las puedes dejar asi preparadas hasta la hora de comer o freirlas directamente.
Frielas en abundante aceite caliente hasta que esten doradas. Yo siempre con los fritos los dejo reposar después de freirlos en un plato con papel de cocina, para eliminar el aceite que pueda haber quedado. Y ya está…así de fácil…y no le hace falta acompañamiento de ningun tipo de salsa, porque la longaniza le da mucha personalidad.
Y mi recomendación es que si tienes peques en casa te diviertas con ellos dándoles forma y rebozándolas ¡Acabarán rebozados ellos también, pero habreis pasado un rato divertido juntos!. ¡Feliz Viernes!
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