Revista Cocina

Tapas de berenjena y salsa tomaca

Por Elijoestarbien @elijobienestar

tapa berenjena

Recuerdo perfecto cuando la receta de la tomaca llegó a mi vida: fue amor del bueno desde el primer bocado.

La tomaca no es más que una salsa de jitomate rallado con aceite, sal y orégano seco, pero, es de esas cosas en que escondido en la sencillez se encuentra lo extraordinario.

El secreto para una buena tomaca son en realidad 2 cosas ni tan secretas:

  1. jitomates bien maduros (hace sentido porque son como el 95% de la receta).
  2. aceite de oliva de la mejor calidad que puedan conseguir (de hecho pueden tener 2 aceites de oliva en casa: uno bueno para cocinar y otro excelente para aderezar).

Si bien soy fan de las salsas asadas y molcajeteadas, por alguna extraña razón que aún no comprendo, en el refrigerador siempre (o casi) hay tomaca pero casi nunca una salsa molcajeteada. A veces pienso que es porque no tengo un molcajete. Ja ja.

¿En qué uso la tomaca?

En todo.

Quesadillas, molletes, sopes, wraps, tacos, pollo o pescado asado, para un huevito revuelto … y hasta para aderezar una rebanada de pizza. Las posibilidades para aderezar con salsas, son infinitas.

Por qué compartir una receta tan boba y además, dedicarle una introducción más larga que la misma receta. La razón es bien sencilla: ¿cuál es la razón de complicarnos la existencia, cuándo la podemos hacer fácil y no por eso menos deliciosa?

Una vez aclarado un punto tan importante, a lo que te truje, Chencha.

Ingredientes para las tapas:

  • rebanadas de pan de centeno o integral
  • rebanadas de berenjenas asadas (clic aquí si no sabes cómo prepararlas)
  • rebanada de queso panela o mozzarella fresco bajo en grasa
  • tomaca

Preparación: 

1. Acomoda el queso y berenjena sobre el pan.

2. Hornea unos minutos hasta que dore.

3. Adereza con mucha tomaca.

4. Come.

Ingredientes para la salsa tomaca:

  • jitomates saladet o perita bien maduros
  • 1 cucharita de aceite de oliva por cada jitomate
  • sal y orégano

Preparación:

1. Parte por la mitad (longitudinalmente) los jitomates

2. En un rallador grueso (de los que se usan para las verduras), raspa cada mitad con la cara cortada hacia abajo hasta que solo te quede la cascarita.

3. Adereza con aceite, orégano y sal.

4. Ya.

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