¿Recordáis a Marta, nuestra ganadora en el concurso de Cocina con guindillas, ¡pues ha vuelto!. Nos ha mandado, de nuevo, una receta que utiliza carne de caza como elemento principal, un auténtico lujo. Como bien dice Marta: “Espero que os guste y que pueda servir a la gente a la que no le resulta fácil encontar recetas sencillas con este tipo de carne”. Gustará, seguro, a mí particularmente me encanta la caza y seguro que a muchos de nuestros seguidores también. Ingredientes:
- 1 Trozo grande de lomo de venado
- AOVE, vinagre y sal.
- Pimienta (en grano o molida).
- Orégano, tomillo y romero.
- Una cucharadita de pimentón dulce.
- Ajo
Pasos a seguir: 1.- La carne de caza es preferible lavarla y congelarla antes de su uso. Una vez descongelada la pieza de lomo, se cortará en filetes. 2.- En una fuente se pone el aceite, un chorro de vinagre y la sal, pimienta molida o en grano (en mi caso, he puesto granos de pimienta rosa), tres o cuatro dientes de ajo en láminas, orégano, tomillo y romero (cuanto más fresco mejor) y una cucharadita de pimentón dulce.
Adobo
3.- Se introducen los filetes en el adobo y se tapa la fuente con plástico. Se deja en la nevera un mínimo de 48 horas (lo recomendado es de 3 a 5 días).
La carne en adobo
4.- El día que se vaya a servir, se pasan los filetes por la sartén muy caliente (sin añadir aceite porque ya lo lleva el adobo) y se hacen vuelta y vuelta para que no se pasen. Ya en el plato, se les añade un poquito de sal. Consideraciones: Servir acompañados de una ensalada de tomate y aguacate o de pimientos asados o de patatas fritas. Salen buenísimos, pero el mérito es de mi amiga Cristina que fue quien me enseñó la receta. También podrían pasarse por huevo y pan rallado y hacerlos empanados, ¡ricos, riquísimos!.