Almejas a la Marinera

Las almejas a la marinera es un plato que siempre asocio a las navidades. Mi madre las suele hacer por Nochebuena y la verdad es que no entiendo por qué, porque es la época del año en que más altas de precio se encuentran, debe de ser que no hay año para comerlas, ja, ja... Yo, por el contrario, suelo hacerlas en verano y me gustan especialmente cuando voy a mi casita de Almería, parece que me saben mejor si me las como mirando al mar (aunque bueno, cualquier cosa mirando al mar sabe mejor). Normalmente hago la receta de mi madre que es espectacular, pero el otro día ví esta receta en la revista Cocina de Verano de Lecturas (que os recomiendo, por cierto) y decidí probarlas dándoles mi toque personal. Muy ricas, así que, no esperéis hasta navidades para prepararlas y probadlas que ahora en veranito con un vinito blanco bien fresquito sientan de maravilla.
ALMEJAS A LA MARINERA CON TABASCO
Para 2 personas: 1 bolsa de almejas; 1 diente de ajo; 1/2 cebolla morada; 1 cucharada de tomate frito; 1 hoja de laurel; Perejil fresco; 1 cucharada de harina; 1/2 vaso de vino blanco; Pimentón dulce; unas gotas de Tabasco Original; Sal; Pimienta; Aceite de oliva.

Lo más desagradable de los moluscos es la tierra que podemos encontrar al comerlos, por ello es importante limpiarlos bien antes de cocinarlos. Para ello ponemos las almejas en un recipiente amplio con agua y sal gorda y las dejamos como mínimo media hora. Pasado este tiempo las escurrimos y las aclaramos bien y las ponemos en una cacerola amplia con medio vaso de agua y la hoja de laurel lavada, tapamos y dejamos cocer hasta que se abran. Colamos el líquido reservándolo y deshechamos las almejas que no se hayan abierto o cualquiera que nos resulte sospechosa.  Mientras, pelamos y picamos el ajo y la cebolla muy finamente (podemos hacerlo con el robot de cocina)  y los ponemos a pochar en una cacerola con aceite durante unos minutos a fuego suave para que no se queme. Añadimos la harina y tostamos durante un minuto sin dejar de remover. Entonces añadimos el tomate frito y el vino. Salpimentamos y subimos un poco el fuego para dejar evaporar el alcohol, una vez evaporado, añadimos unas gotitas de Tabasco Original y removemos. En este momento añadimos las almejas junto con el líquido de cocción colado  y dejamos cocer todo junto unos minutos. Espolvoreamos con perejil fresco picado y servimos bien calientes. Lo más rico es comerse la salsita con la cáscara de las almejas, a mí por lo menos me encanta.


¡Feliz Miércoles!