Aprender a disfrutar del deporte

La inmensa mayoría de la gente se plantea en algún momento de su vida el hacer algo de deporte con idea de ponerse en forma y luchar un poco contra las consecuencias de una vida sedentaria o una alimentación poco saludable.

Muchos se lo plantean como un objetivo para Año nuevo o tras las vacaciones de verano, sin embargo a la hora de la verdad, aunque nos lleguemos a poner con ello, será cuestión de tiempo que perdamos esa motivación y volvamos a nuestra rutina poco saludable.

Hacer deporte tiene múltiples beneficios a largo plazo, como por ejemplo el reducir las probabilidades de sufrir ciertas enfermedades, una mayor longevidad y pérdida de peso. Pero hoy en día el “largo plazo” se nos hace muy cuesta arriba, además muchos no tienen paciencia ni constancia.

Existen muchísimos estudios que abordan esta problemática entre motivación y actividad física, y de todos ellos se puede extraer algunas enseñanzas. Quizás debemos dejar a un lado el objetivo final o el objetivo a largo plazo y fijarnos otros objetivos para ir poco a poco y estar siempre motivados.

• Motivación personal, es importante para darle sentido, para hacer que realizar ejercicio nos resulte gratificante. Debemos intentar que cada carrera o sesión de spinning tenga un significado personal, que nos aporte algo y nos impulse a querer seguir.
• Dominio o maestría, es el tratar de aprender a supervisar nuestras mejoras en el rendimiento, sería básicamente el retarnos a nosotros mismos, el ir alcanzando metas o récord personales como levantar un poco más de peso o correr unos kilómetros más allá. Es mucho más sencillo que compararse con otras personas que pueden tener una mejor preparación o predisposición para el deporte, que no harían sino frustrarnos, intimidarnos o desmotivarnos.
• Sinergia, que sería la idea de combinar la motivación personal con el dominio, es decir, en el momento que vinculas el ejercicio físico a algún área de tu vida te es mucho más fácil seguir practicándolo. Por ejemplo cuando te planteas hacer deporte para practicar tu concentración, para meditar, para desconectar o para socializar, ya sea con amigos o con tu pareja, o para contribuir en actividades solidarias como carreras benéficas.
• El flow, sería el cuarto factor que nos ayudaría a aprender a disfrutar del deporte y mantener la constancia en la práctica del ejercicio físico. La idea es que cuando hagamos una actividad física nuestra mente, nuestro estado psicológico se centre totalmente en disfrutar de la experiencia.

Cierto es que a veces es complicado concentrarse, puede que los problemas nos vengan a la mente o la gente con la que nos cruzamos, pero debes tratar de aprender a concentrarse en todo lo que ocurre, en cómo tu cuerpo reacciona y trata de superar el reto físico que le planteas, y cómo con el paso de los días vas progresando.

En general es importante el marcarse nuevos retos, metas que sean alcanzables a corto plazo y que nos mantengan “enganchados” al deporte, de lo contrario en pocas semanas podemos perder el interés y echar por tierra todo el esfuerzo realizado. Además es importante que hagamos deporte porque nos apetece, no por obligación.

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